Uno de los propietarios de la berlina eléctrica de Tesla, ha logrado alcanzar la cifra de 100.000 millas en apenas 21 meses. 160.000 kilómetros que suponen una media de más de 250 kilómetros diarios, en los que no ha consumido un litro de gasolina.
Una cifra de kilómetros que en Estados Unidos suele asociarse al momento de cambiar de coche, pero que para este usuario, no ha sido más que el principio de la aventura.
Una de las primeras preguntas que nos asalta es saber el estado de la batería. Según la última revisión por parte de Tesla, esta acumula una pérdida de capacidad de apenas el 5%. Esto significa que los 426 kilómetros según el ciclo EPA, se han visto recortadas en 21 kilómetros, quedando en 405 kilómetros, o lo que es lo mismo, una pérdida aproximada de unos 4 kWh.
Sin duda se trata de un rendimiento excelente, en el que tendrá mucho que ver el sistema de refrigeración de las baterías, ya que este usuario ha visitado habitualmente los supercargadores de Tesla.
Podemos comparar esto con el rendimiento que algunos usuarios están teniendo en modelos como el Nissan LEAF. Estos con apenas 18.000 kilómetros, ya han perdido una barra, y son muchos los casos de la pérdida de dos barras con menos de 50.000 kilómetros.
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Nos queda saber los detalles de si este Model S también ha sufrido algún cambio de motor, o los pequeños problemas que han azotado a algunos usuarios, como puertas que no se abren, y otros pequeños problemas.
Pero lo que está claro es que si con 160.000 kilómetros sólo ha perdido un 5% de capacidad, está claro que salvo sorpresa, la batería no será la que ponga punto final a la vida de este coche.
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