Coincidiendo con la semana santa, unos emprendedores han puesto en marcha Rapimoto, un servicio de taxi donde la protagonista será Di Blasi, una moto eléctrica plegable, capaz de ser introducida en el 98% de los maleteros y que nos ofrecerá una alternativa para poder volver a casa con nuestro coche después de una noche de copas.
Málaga y Castellón serán los escenarios donde comenzarán sus operaciones estos empresarios, que han importado esta idea de Londres, donde lleva unos años en funcionamiento con bastante aceptación.
La idea es sencilla, pensemos en una noche de copas donde queremos volver a nuestra casa, pero claro, no podemos coger el coche, pero al mismo tiempo tampoco podemos dejarlo, ya que nos puede hacer falta por la mañana. Llamamos a Rapimoto y en unos minutos se presentará uno de los empleados a los mandos de una de las motos eléctricas.
Simplemente plegará la moto, la introducirá en el maletero de nuestro coche y nos devolverá a casa mientras vamos tranquilamente en el asiento del acompañante, sin el peligro de provocar un accidente o que nos pare tráfico. Al llegar a nuestro destino, el conductor simplemente sacará su moto de nuestro maletero, y regresará a su base.
Las tarifas variarán dependiendo de nuestras necesidades y la longitud de nuestro recorrido, y se dividirán en varias categorías:
Restaurantes (20 euros para cubrir una ruta de 10 kilómetros, más 90 céntimos por Km añadido).
Chófer por horas (pensado para grupos y varias paradas con espera)
Desplazamientos a los aeropuertos de Valencia (30 euros) y Barcelona (100 euros más peaje), donde dejan al cliente y le devuelven el coche a casa.
Según Andrés Garcia, uno de los responsables de Rapimoto.
«Cada día que pasa somos más conscientes del peligro que corremos al volante tras ingerir alcohol, más en estas fechas de operaciones salida y retorno de Semana Santa. Y las opciones eran el transporte público -donde lo haya- el taxi o el coche a riesgo y cuenta de multas o accidentes. Nosotros ofrecemos una nueva opción: Nos llamas, nos acercamos al restaurante en el que estás en nuestra moto, la plegamos en el maletero de tu coche y te llevamos a ti y a tu vehículo a casa o donde quieras«
Sin duda se trata de una solución ingeniosa que evitará que muchos caigan en las tentación de ponerse a los mandos de su coche después de unas copas, un servicio con un precio razonable del que sacarán partido los grupos de amigos que hasta el momento, deben poner un conductor que no beba por noche, y todo con una moto eléctrica perfectamente pensada para esta labor.
Lo que nos queda por saber es la opinión de los taxistas, que estamos seguros no estarán muy contentos con esta nueva competencia.
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Fuente | El mundo
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