Cinco grandes fabricantes, BMW, Daimler, Honda, Hyundai y Toyota, se han unido a los principales fabricantes de hidrógeno de Europa, para impulsar la tecnología de los coches alimentados por por una pila de combustible en el viejo continente.
El proyecto ha sido presentado por el alcalde de Londres, y pretende instalar 110 estaciones de repostaje por toda Europa. Contará con un presupuesto de 37.5 millones de euros, y permitirá la apertura de las primeras estaciones a lo largo del próximo 2015.
Estas infraestructuras estarán situadas principalmente en el centro y norte de Europa. Los primeros emplazamientos tendrán lugar en ciudades como Copenhagen, Dinamarca, Innsbruck, Austria; Munich y Stuttgart, Alemania, y por supuesto la capital británica, Londres.
Según el alcalde de Londres, para vender la tecnología es necesario mostrar que no es ciencia ficción. Que es una opción válida y funcional, a la que sólo le falta los coches, y las propias infraestructuras de recarga. Dos detalles imprescindibles sin los que el coche a hidrógeno seguirá sin tener una mínima presencia.
La realidad es que con 37 millones de euros, los operadores apenas tendrán para empezar. A la vista del coste de cada hidrogenera, en torno al millón de euros, y los trámites burocráticos en cuanto a seguridad, mucho nos tememos que el desarrollo será muy lento, más incluso que la infraestructura para la recarga de coches eléctricos, mucho más sencilla y económica.
[blocktext align=»left»]¿Cuanto costarán los coches? ¿Cuanto el combustible? ¿Cuál será la vida útil de la pila de combustible? Demasiados interrogantes.[/blocktext]El otro problema es que a falta de menos de un año para el lanzamiento de los primeros modelos, todavía no sabemos ni su precio, ni el coste que tendrá su repostaje. Dos detalles demasiado importantes como para dejarlos a un lado, mientras por el otro se invierte dinero en desplegar una red de hidrogeneras.
Mientras tanto, desde Japón nos llegan noticias de que los productores de hidrógeno, aspiran a que su el coste del hidrógeno sea similar al de la gasolina, todo un aviso a navegantes.
Vía | ibtimes
