A pesar del repunte del pasado mes de mayo, las ventas de coches eléctricos en Francia ha sufrido una bajada. En los cinco primeros meses del año, las matriculaciones se han reducido un 16% en el país vecino. Algo que ha hecho reflexionar a su administración.
Una de las primeras medidas será la de cambiar la legislación en cuanto a las ayudas. De momento parece que las cifras seguirán iguales, hasta 6.300 euros. Lo que cambiará serán detalles como la limitación de estos incentivos a los coches entregados en formato leasing. Una limitación absurda, ya que las empresas han sido hasta ahora los principales clientes de este tipo de vehículos.
Pero tal vez la apuesta más importante sea la destinada a los puntos de recarga. El ejecutivo galo sabe que sin una buena infraestructura, no habrá ventas por muchas ayudas que se entreguen. Uno de los problemas de la baja expansión de los puntos de recarga, es la propia legislación.
Hasta ahora han sido las regiones han sido las encargadas de gestionar los recursos entregados por el gobierno. El objetivo era llegar a los 75.000 puntos de recarga en 2015. Pero a día de hoy, apenas llegan a 8.000, contando con las 5.000 del programa Autolib. Como decimos, el problema está en unas autoridades locales, que no han sabido o no han querido usar los recursos que el gobierno central ha puesto a su disposición. Un ejemplo, de los 50 millones destinados al despliegue de puntos de recarga, las regiones hasta ahora sólo han usado 12 millones.
La prioridad serán los puntos de recarga
A la vista de las circunstancias, el gobierno central retomará las competencias, y se hará cargo del despliegue de recarga. Una de las primeras medidas será dar todas las facilidades a los operadores interesados en instalar este tipo de infraestructura. por ejemplo, se eliminará la tasa estatal que hasta ahora debían pagar.
Las reacciones no se han hecho esperar. Operadores como la eléctrica EDF, han mostrado su interés por crear un corredor eléctrico. Esta nace en colaboración con fabricantes como Nissan, Renaul o BMW, y con el objetivo de instalar 200 estaciones de recarga rápida. Unos puntos de recarga que además serán multiestándar, por lo que prácticamente cualquier modelo del mercado podrá usarlos.
Vía | Les Echos (francés)
