Una de las principales características del lanzamiento del primer BMW eléctrico, es que el cliente puede seleccionar si prefiere la versión eléctrica pura, o una dotada de un pequeño motor gasolina de 600cc, que hace las veces de generador para ampliar la autonomía.
Ahora un ejecutivo de Toyota asegura que están preparando un BMW con extensor de autonomía a hidrógeno, y todo hace indicar que se trataría de un i3.
Según Craig Scott, jefe de vehículos avanzados de Toyota en Estados Unidos, sin nombrar al i3, asegura que este prototipo se beneficiaría de la experiencia lograda por la colaboración entre la propia BMW y Toyota. Una fórmula que beneficiaría a BMW, al reducir el nivel de inversión necesaria, ya que el i3 no necesitaría grandes modificaciones, y a Toyota, que lograría aumentar la producción y rebajar los elevados costes de las pilas de combustible de hidrógeno.
El resultado sería un modelo todavía más eficiente. El pequeño motor gasolina ha demostrado que sirve como soporte, pero es incapaz de proporcionar la energía suficiente para mantener las prestaciones del motor eléctrico. Además lo hace con un nivel de eficiencia bastante bajo, que en nuestra prueba dinámica, arrojó un consumo de 7 litros a los 100km.
Ahora las preguntas se ciernen sobre el coste que tendría montar una pila de cobustible en un BMW i3. Si un pequeño motor gasolina de scooter supone incrementar en 5.000 euros el precio, no queremos imaginar cuanto costaría ahora mismo el salto al hidrógeno. Dejando aparte temas como el coste del propio hidrógeno, y su red de repostaje.
Otro aspecto es que normalmente el uso de este generador es ocasional, por lo que su eficiencia no es un elemento clave a la hora de su adopción. Por lo que instalar una pila de combustible podría ser un plan a largo plazo, o simplemente una idea que no llegará a materializarse a nivel comercial.
Vía | Motoring
