La primera propuesta de Toyota en el segmento de los coches a hidrógeno, el Toyota Mirai, ha logrado hacerse con 1.500 reservas durante el primer mes de estas activas. Esta cifra no sería demasiado llamativa de no ser por el reparto de las ventas.
Según el fabricante japonés el 60% de los pedidos proceden de organismos públicos y flotas de empresas. Esto deja un 40% de pedidos por parte de particulares. Como decimos se trata de una cifra más que buena aunque de momento sólo refleja un periodo de tiempo muy pequeño, pero que de tener su extensión supondría todo un respaldo para esta tecnología.
Además estas ventas se concentran en unas zonas muy concretas de Japón, como son las prefecturas de Aichi, donde tiene su base Toyota, Fukuoka y Kanagawa donde se concentran la mayor parte de la infraestructura de repostaje de hidrógeno de Japón.
A la vista de esta aceptación Toyota ha confirmado que se preparan para cuadriplicar la actual pequeña producción. De esta forma se espera que para finales de este año Toyota logrará aumentar la fabricación hasta llegar a las 2.100 unidades, llegando a las 3.000 unidades al año para 2017.
Cifras contenidas que suponemos esperan a la evolución de la red de distribución de hidrógeno que marcará el incremento o congelación de esta producción.
Vía | Nikkei
