Francia pondrá en marcha una ayuda de 10.000 euros a la compra de coches eléctricos
El pasado otoño la Ministra de energía de Francia, la Sra Segolene Royal, presentaba un ambicioso plan destinado a animar a que la gente cambie sus viejos y contaminantes modelos diésel por coches eléctricos.
Un programa que pondrá sobre la mesa una ayuda de 10.000 euros, a los que a partir de 1 de abril entreguen un coche diésel con 13 o más años de antigüedad. La idea es financiar esta ayuda con los impuestos a la compra de coches contaminantes, que se han convertido en el enemigo número 1 de Francia en cuanto a la lucha contra la contaminación.
Curiosamente hasta el momento los modelos diésel pagaban menos impuestos que los gasolina. Este ha sido uno de los motivos de la adopción masiva del gasóleo en un país donde el pasado año saltaban todas las alarmas por los niveles de emisiones en ciudades como París.
El pasado año el 64% de los coches vendidos en Francia eran diésel, en un parque móvil donde el 80% funcionan mediante gasóleo. El resultado según el ministerio de sanidad francés es que el 60% de la población respira aire que no es saludable.
El gobierno espera que con este cambio de sistema impositivo, la gente empiece a adoptar otras formas de movilidad, poniendo especial énfasis en los coches eléctricos que con este empujón podrían vivir un año histórico en el país vecino.
Gracias a estos 10.000 euros por ejemplo los franceses podrán hacerse con una unidad del Renault ZOE por apenas 12.400 euros, más alquiler de batería, mientras que por un LEAF tendrán que desembolsar 20.290 euros para la versión más básica con batería en propiedad.
Vía | Autonews