Desde la consultora Munro & Associates nos llega un interesante vídeo en el que podemos ver la batería del BMW i3, por dentro. Este vídeo es parte de un informe completo sobre el i3 en el que aparecen datos de todo tipo: cuales son los proveedores de las piezas, que tecnología usan o cual es el coste aproximado de fabricación del vehículo, entre otras cosas. Como no podía ser de otra manera, el objetivo de Munro & Associates es vender el informe a las empresas del mundo de la automoción que estén interesadas, a cambio de una importante suma de dinero. Se habla de una cifra cercana al medio millón de dólares a cambio del detallado informe.
En el vídeo podemos comprobar cómo la batería es una parte importante del chasis del vehículo y lo fácil que resulta extraerla. El motivo de este diseño es facilitar las posibles reparaciones que pueda tener el vehículo en el futuro. Se pueden apreciar claramente los diferentes módulos de los que está compuesta la batería. En caso de que algún módulo llegase a estropearse, bastaría con cambiar dicho módulo sin tener que cambiar la batería entera, lo que abarata futuras reparaciones.
Además, los módulos están ubicados de tal forma que no sufren apenas vibraciones. Los conectores de los cables también están diseñados a prueba de vibraciones, para que no se desconecten solos. En el vídeo también se puede ver el importante sistema de refrigeración de las baterías, encargado de que estas trabajen en el rango de temperatura óptima. Para refrigerar las baterías, el i3 utiliza el propio sistema de aire acondicionado del vehículo. En días fríos, en cambio, la batería cuenta con una resistencia eléctrica en la cual se disipa electricidad para generar calor. Al provenir la electricidad de las baterías, no hace falta decir que esto reduce la autonomía del vehículo.
No se que tal le habrá sentado a BMW que unos señores hagan negocio a costa de destripar su modelo eléctrico. Por lo que a nosotros respecta, como aficionados a la movilidad eléctrica, esperamos que sigan revelando secretos acerca de la industria.
Fuente | Munro & Associates
