BMW y Pacific Gas and Electric han llegado a un acuerdo para poner en marcha el proyecto BMW i ChargeForward Program. A través de este programa, se pretende evaluar la gestión inteligente de la recarga del coches eléctrico. 100 propietarios del BMW i3 participarán en este proyecto.
Los usuarios del BMW i3 permiten que la empresa eléctrica gestione la recarga de su coche, llegando a poder atrasarla hasta una hora. Por supuesto, los participantes reciben una compensación económica, que va desde los 1.000 dólares iniciales hasta 1.540 según el índice de participación en le programa. Pacific Gas and Electric tendrá unos 100 kW de potencia disponibles en cualquier momento.
Los conductores son notificados mediante un mensaje de texto en caso de que la recarga de su vehículo se vaya a retrasar, pudiendo cancelarlo mediante un app móvil en función de las necesidades de conducción.
Según declaraciones de responsables del grupo BMW: «Una de las cosas que queremos saber mediante este proyecto son los hábitos de carga de los usuarios y cómo de flexibles son. Con los resultados podremos diseñar futuros productos que beneficien tanto a las eléctricas como a los usuarios.»
Además, de forma paralela se ha montado un sistema de almacenamiento de 240 kWh, construido a partir de baterías usadas del Mini E que aún conservan alrededor del 70% de capacidad. Se trata de uno de los sistemas de baterías usadas más grande del mundo.
El potencial de la recarga inteligente es enorme. Además de ser necesario, en una red eléctrica con 50.000 coches eléctricos, contando 1 kW por coche, habría 50 MW de potencia disponibles.
Fuente | Bloomerang
