Muchas veces hemos pensado en coches voladores. En uno de los sueños del ser humano, y una de las escenas más repetidas en las películas futuristas. Pero hacer volar un coche es muy difícil. Pero no así un pequeño scooter.
Con esa idea en la mente el alemán Thomas Senkel se lanzó a diseñar un sistema tan sencillo, como efectivo. Un scooter eléctrico, homologado para circular por la carretera, dotado de un rotor y un paracaídas que le permite mantener el vuelo.
El primer vuelo ha tenido como escenario la costa de Las Palmas. En este privilegiado espacio Thomas ha logrado realizar el que posiblemente sea la primera prueba de un scooter eléctrico capaz de volar, pero que como hemos dicho también puede moverse de forma legal por las carreteras.
En cuanto a los detalles técnicos, el scooter cuenta con un motor eléctrico de 6 kW, mientras que el propulsor de vuelo instalado en la parte trasera tiene una potencia de 13 kW. Estos se alimentan de una pequeña batería de 3 kWh, que le proporciona una autonomía de 120 kilómetros en carretera (suponemos que cuesta abajo) o 30 minutos de vuelo constante.
Según su desarrollador, el funcionamiento es de lo más sencillo, y de esa forma simplemente debes conducir tu moto hasta un lugar donde encuentras corrientes que te permitan ascender, desplegar el paracaídas, y acelerar. Un sistema que además de compacto y sencillo, es económico y silencioso.
En estos momentos Thomas se encuentra en plena fase de desarrollo del producto a nivel comercial, y espera que en pocos meses sea posible comprarse un scooter eléctrico, y salir volando con el.
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