Esta tarde Tesla ha desvelado sin grandes fanfarrias la nueva versión del Model S. Una renovación de la que lleva tiempo hablándose, y que ha provocado unos cuantos rumores y especulaciones.
Sin duda lo más llamativo es el cambio de imagen. Un nuevo frontal que ya hemos visto esta tarde gracias a una filtración. Un aspecto esperado por los aficionados después de tres años en el merado, y que supone decir adiós al bigote del Model S que es sustituido por un frontal más dinámico y armónico.
Lo que finalmente no se ha confirmado ha sido la nueva batería. Se esperaba la presentación de una nueva versión dotado de una batería de 100 kWh. Pero finalmente esa opción tendrá que esperar, al menos hasta el mes de julio.
Pero esto no quiere decir que no haya novedades en este aspecto. Como podemos ver en la página de Tesla, la autonomía han crecido ligeramente en el 90D, que pasa de los 463 kilómetros a los 474 kilómetros EPA.
Por su parte el P90D no ve modificadas sus cifras quedándose en los 434 kilómetros. Tampoco hay novedades en el modelo básico, el 70 y 70D que se quedan con unas cifras de 370 y 386 kilómetros respectivamente.
Como decimos se queda en el tintero la versión de 100 kWh. Pero al mismo tiempo nos queda la pregunta de cual será la autonomía de esta variante a la vista del incremento de las actuales versiones. Con esta renovación se ha logrado aumentar un 3% el alcance. Si añadimos otros 10 kWh, es posible que veamos un salto de otro 10%, lo que llevaría la autonomía del Model S 90D hasta una cifra cercana a los 520 kilómetros bajo el ciclo EPA.
Las novedades siguen con el equipamiento, donde destacan elementos como los nuevos asientos heredados del Model X. También del todocamino vemos como llega el sistema de aislamiento del interior hasta un nivel anti ataque biológico. Un filtro 100 veces más eficaz que su predecesor.
Novedades también en el cargador interno, que pasa de 40 a 48 amperios, lo que permitirá acelerar la recarga en los puntos de recarga públicos y en el hogar. Al contrario de lo que se había rumoreado, al menos de momento no hay noticias sobre la posible compatibilidad con los puntos bajo el formato CCS Combo.
Por lo demás vemos algunos cambios como nuevos colores del interior, un nuevo sistema de iluminación LED con tres posiciones y que se adapta de forma automática para ofrecer la máxima visibilidad, pero sin riesgo de deslumbrar al resto de vehículos. Algo a lo que sumar una nueva actualización del sistema de autopilotaje que según parece vendrá acompañado con nuevos sensores que permitirán ofrecer un nuevo nivel de precisión.
Lo mejor de todo es que aquellos que hayan realizado una reserva antes de la presentación de la nueva versión, recibirán el modelo renovado sin un coste añadido que si tendrán que afrontar los nuevos usuarios, que tendrán que abonar unos 1.500 dólares adicionales.
