El pasado año el gobierno de Dinamarca anunció el final del programa de incentivos fiscales a los coches eléctricos. Una decisión que suponía en la práctica un incremento de entre el 25 y el 30% en el precio de los coches, y que provocó carreras a última hora para matricular coches antes de la entrada en vigor de la normativa. Algo que ha comprobado especialmente Tesla.
En 2015 Tesla estaba matriculando de media unos 83 coches cada mes en Dinamarca. Pero con el final de las ayudas la cosa se desmadró hasta llegar a las 525 entregas en noviembre, y nada menos que 1.248 unidades en diciembre. Un desembarco masivo que ha pillado por sorpresa al fabricante norteamericano.
El problema es que Tesla sólo tiene dos servicios técnicos en Dinamarca (mi reino por uno sólo en España). Un par de talleres que con una flota de 1.000 Tesla no tenían problemas para atender las necesidades de sus clientes. Pero en apenas unos meses esta flota se ha multiplicado por más de dos, dando como resultado una carga de trabajo por encima de sus posibilidades.
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El Tesla Model S y sus problemas de fiabilidad [/blocktext]
La lista de espera para una reparación está entre los dos y los tres meses. Algo que está provocando las quejas de cientos de usuarios que tienen que esperar demasiado tiempo para cualquier operación, incluso las más sencillas. Una situación que ha llevado a algunos usuarios a desplazarse hasta Hamburgo, Alemania.
Una demanda por encima de las posibilidades que puede ser interpretada de forma negativa, como ha hecho la prensa local enfatizando el enfado de los usuarios, pero también desde un punto de vista positivo, ya que hablamos de un mercado que ha crecido de forma poco natural impulsado por las políticas del gobierno, y que ha desbordado las previsiones de Tesla.
La pregunta es si Tesla abrirá otro servicio técnico, a pesar de que la demanda ha caído desde enero con una media de unas 40 matriculaciones, o intentará reforzar los dos talleres para salir del paso hasta estabilizar esta repentina y puntual demanda. La cuestión es que las críticas de los usuarios están dañando a la marca, hasta ahora con una gran puntuación en páginas como Trustpilot, pero que ahora está viendo como el problema del servicio técnico está hundiendo sus puntuaciones.
La otra pregunta es que sucederá cuando llegue el Tesla Model 3. El desembarco del nuevo modelo traerá consigo un número muy elevado de nuevos coches en las calles. Unos modelos que también necesitarán sus mantenimientos y revisiones, y que pueden colapsar las zonas donde exista mayor demanda.
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Vía | DR (danés)
