Una de las características más interesantes de los modelos de Tesla, es la posibilidad de solucionar la mayor parte de los problemas que puedan surgir en el software del coche a distancia. Una solución que permite arreglar ciertas situaciones, sin necesidad de que los clientes acudan a una concesión un servicio técnico propio.
Ahora General Motors ha confirmado que el Chevrolet Bolt también optará por este sistema, que además permite actualizar diferentes aspectos del coche a distancia. Una actualización OTA que por defecto también debería estar disponible para la versión europea, el Opel Ampera-E.
Esto permitirá mejorar la experiencia de los usuarios que opten por este modelo, y no tengan un concesionario habilitado para su mantenimiento cerca. Algo que sucede con la mayor parte de las marcas, incluyendo la propia Opel, que en su momento apenas contaba con un puñado de concesiones en nuestro país capaces de atender el mantenimiento del Ampera.
Pero el problema en el caso de General Motors es que pasa con los concesionarios. Las actualizaciones inalámbricas permiten saltarse los talleres oficiales para muchas operaciones que antes había que realizar en los mismos. Algo que puede permitirse Tesla, que es propietaria de su red, pero que será un problema para el resto de las marcas.
Un ejemplo de esta peliaguda situación ha sido el caso que el año 2014 un mismo problema ha afectado a los modelos de General Motors y Tesla. Mientras que los de Tesla recibían la actualización de forma inalámbrica en sus coches, los de General Motors han tenido que acudir a su concesionario más cercano para aplicar esa misma actualización.
A esto se añade la menor tasa de visitas al taller de un coche eléctrico respecto a un modelo convencional. Una situación que posiblemente obligue a General Motors o bien a compensar a los concesionarios por cada unidad actualizada a distancia, o cobrar a los clientes por esas actualizaciones.
Precisamente las actualizaciones a distancia son una de las cinco funcionalidades que más valoran los propietarios de un Tesla. Un nuevo ejemplo de que la decisión de Tesla de optar por un sistema de tiendas propio ha sido de lo más acertado, y será una ventaja competitiva que el resto de fabricantes no pueden ni aspirar a tener.
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Vía | Electrek
