Hace unos días eran unos documentos filtrados de la petrolera Exxon, que ponían al descubierto un plan para intentar ralentizar el despliegue de los coches eléctricos en Reino Unido. Ahora nos llega otra noticia de una petrolera, pero en esta ocasión por un motivo mucho más agradable.
Según se desprende de la filtración de unos emails, Shell, el gigante anglo-holandés está valorando la idea de lanzarse a la instalación de una red de recarga para coches eléctricos. Una forma de diversificar su negocio y un gesto que podría tener importantes repercusiones.
Esta noticia ha sido revelada gracias a una serie de correos electrónicos enviados en entre empleados de Shell y responsables del Área de Transporte del Gobierno Británico. Según declaraciones de de fuentes internas de la petrolera al diario The Guardian: «Estamos examinando la posibilidad de introducir puntos de recarga de vehículos eléctricos a través de algunos establecimientos de nuestra red minorista en el Reino Unido. Sería a partir de 2017.»
En los correos se puede ver un intercambio de impresiones entre trabajadores y funcionarios. Se comenta que los coches eléctricos no están suficientemente respaldados por puntos de recarga, y que es algo necesario ya que su autonomía aún no es suficiente. También se habla de los trámites burocráticos que tendría que hacer Shell para vender electricidad a sus clientes.
Parece que algunas petroleras se dan cuenta de que los coches eléctricos pueden ser una amenaza para su negocio. Y como se suele decir en estas ocasiones, «Si no puedes con tu enemigo, únete a él». Algo que ya hemos visto en nuestro propio país, donde el Gestor de Carga IBIL es propiedad al 50% de Repsol y el Ente Vasco de la Energía.
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Vía | Diariorenovables
