Durante la presentación del Volkswagen I.D. hemos podido ver que además de un coche eléctrico, este contaba con una base modular que permitirá lanzar modelos con diferentes configuraciones. Compactos, todocamino, e incluso, alguna cosa diferente.
Esto es precisamente lo que presentará el grupo alemán en el Salón del Automóvil de Detroit. Un microbús basado en el prototipo BUDD-e, que llegará con un sistema eléctrico en su interior, pero además contará con capacidad de conducción autónoma.
Al menos en un primer momento la idea detrás de este concepto no estaría lanzar un modelo comercial. El objetivo serían los sistemas de car sharing, que se extienden como la pólvora por todo el mundo. Un sector donde el grupo Volkswagen se ha metido de lleno recientemente con la presentación de su empresa MOIA.
Según la nota de prensa, este «Será un concepto multifuncional para una nueva era«. Una era donde el tener un coche en propiedad es cada vez menos tendencia, donde el car sharing tomará al asalto las calles de las grandes ciudades, y donde los usuarios no tendrán ni que conducir.
Este modelo contará con un volante que podrá guardarse en el salpicadero, para de esa forma junto con una plataforma diseñada para albergar las baterías en los bajos, liberar una importante cantidad de espacio en el interior del vehículo. Un espacio donde los pasajeros podrán relajarse e ir charlando mientras completan su desplazamiento. Todo con un diseño que mezclará lo clásico de las míticas furgonetas de los años 60 de VW, con las soluciones del futuro.
A pesar de que las imágenes publicadas dan la impresión de ser un simple render, los responsables de Volkswagen han indicado que su proceso de diseño está muy avanzado, y durante su presentación veremos una propuesta muy cercana al modelo de producción.
Un modelo que contaría con la plataforma MEB, diseñada específicamente para coches eléctricos, y donde tendría espacio para albergar hasta 101 kWh, que son los declarados en el primer prototipo presentado a principios de este mismo año. Una batería que le proporcionaría una autonomía de unos 600 kilómetros.
Eso si, para poner este concepto en la calle primero habrá que completar una buena ración de pruebas. Y como estas pruebas todavía no han comenzado, es de esperar que el desembarco comercial del microbús eléctrico y autónomo de Volkswagen todavía tendrá que esperar al menos hasta 2020 para llegar al mercado.
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Fuente | VW
