La pasada semana saltaba a las primeras páginas de los diarios alemanes la noticia de un accidente múltiple en una autopista del país. Un choque múltiple que ha involucrado a 31 vehículos, y que se ha saldado con la muerte del conductor de un Tesla Model S, además de 10 personas con heridas leves, 3 heridos graves, y 3 en estado crítico.
La principal noticia es que en total la fiscalía alemana había incautado 7 vehículos para la investigación. Y entre ellos ha estado el Model S al que los medios alemanes no han tardado en insinuar que circulaba con el Autopilot puesto durante el accidente.
Ahora los primeros resultados permiten realizar un análisis menos sensacionalista de este desgraciado incidente, y donde se indica que el Model S no ha sido el primer causante del choque. Desde Tesla también se ha indicado que los registros del vehículo indican que en el momento del choque, el Autopilot no estaba conectado.
El conductor era un varón de 73 años residente en la localidad de Bremen, que ha sufrido varios choques e incluso ha dado varias vueltas de campana. Un accidente que junto con las maniobras de los bomberos para la extracción del cuerpo, ha dejado el coche en un estado casi irreconocible.
De momento no hay informe de la policía, por lo que no se puede determinar las causas del accidente, pero todo hace indicar que el estado de la carretera, producto de una fuerte granizada, ha convertido el asfalto en una pista de hielo, provocando un choque múltiple que ha involucrado a coches y camiones, y que ha necesitado la movilización de más de 120 miembros de bomberos y equipos de asistencia, y que por desgracia se ha cobrado la vida de una persona.
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Vía | M.ln-online.de | Electrek
