Después de varios meses desde la confirmación del acuerdo, que ha tenido que ser validado por las autoridades de la competencia de la UE, finalmente General Motors y el grupo PSA han confirmado la firma del de la venta de Opel al fabricante francés.
Una de las grandes preguntas era qué pasaría con el proyecto eléctrico de Opel encarnado de momento sólo en el Ampera-e. El hermano gemelo del Chevrolet Bolt que se ha quedado en medio de un divorcio amistoso viendo como se ralentiza su expansión en Europa.
Y es que General Motors y PSA han reafirmado su compromiso de colaboración y de esa forma Opel seguirá fabricando en sus plantas marcas como Buick y Holden. Además esto se extenderá al sector del coche eléctrico. Opel seguirá vendiendo el Ampera-e.
De momento desde el fabricante ya propiedad de PSA no se han dado detalles sobre la evolución de las ventas del Ampera-e. Lo que si parece seguro es que al menos a corto plazo, Opel seguirá con este modelo como principal argumento en el sector de los eléctricos. Pero a largo plazo lo más probable es que PSA cambie de rumbo y continúe por otros derroteros, como por ejemplo el nuevo modelo que está desarrollando en colaboración con los chinos de Dongfeng.
Una buena noticia que permitirá que en 2018 la distribución del Ampera-e salvo cambio de última hora, logre escalar de forma importante sus números. Algo que será posible gracias a la firma definitiva del acuerdo General Motors-PSA, como por el final de la fase de expansión del propio Chevrolet Bolt por los diferentes estados norteamericanos.
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