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Ahora no Permitir

Tesla confirma que prohibirá el acceso a los Supercargadores a taxis y VTC

Tesla ha actualizado las condiciones de uso de su red de Supercargadores, y de esa forma aquellas unidades matriculadas después del 15 de diciembre, y que sean usados con fines comerciales, no podrán dar uso a esta infraestructura.

Esto significa que taxis, ni tampoco unidades de transporte privado, los VTC como Uber o Cabify, no podrán utilizar la red de Supercargadores. Tampoco lo podrán hacer aquellas unidades destinadas a labores comerciales o los usados por las administraciones públicas.

El objetivo es mantener la red bajo la premisa por la que ha sido desplegada, y eso es servir de apoyo a los viajes de los propietarios de un Tesla. Desde el fabricante también se ha indicado que muchas veces los profesionales han acaparado las tomas, impidiendo o retrasando la recarga de aquellos particulares sin otra forma de recargar su vehículo.

Según la nota de prensa publicada por el fabricante norteamericano «En algunas zonas, el uso intensivo de los Supercargadores por parte de clientes comerciales como taxis puede ocasionalmente afectar la disponibilidad para otros conductores. Este cambio en las normas de uso alentará el uso justo de Supercargadores por tantos clientes como sea posible.»

Desde Tesla también se ha indicado que podría bloquear de forma definitiva el acceso a la red a aquellos vehículos que violen esta nueva normativa, pero que también aplicarán excepciones a determinadas estaciones o momentos del año concretos.

Opinión

Sin duda este cambio es un duro golpe para aquellos servicios que han encontrado en la recarga rápida y gratuita de sus coches un filón hasta ahora inagotable. Unos vehículos que por otra parte han servido como modelos de muestra para saber el comportamiento de los coches en la carretera después de cientos de miles de kilómetros. Algo positivo para la marca. Podemos recordar el caso de Tesloop, con un Model S con 483.000 kilómetros recorridos en 2 años, que había permitido a su propietario un ahorro de unos 70.000 euros en gasolina.

Parece también una medida algo extraña, ya que en lugar de aplicar un cargo por el uso de dicha red, como hace con los usuarios que compran una unidad desde mediados de este año, Tesla directamente prohíbe el uso de los cargadores a los profesionales. Algo que supone un jarro de agua fría a las aspiraciones de muchos que veían con la expansión de la red un importante incentivo para saltar a un Tesla para sustituir a su taxi diésel.

Una nueva política que como decimos, afectará a las unidades compradas desde el 15 de diciembre en adelante, por lo que aquellos que ya tengan un Tesla, no se verán afectados por este cambio, y que parece un movimiento más para amortiguar la llegada de las cientos de miles de unidades del Model 3 que desembarcarán en los próximos meses al mercado, y que añadirán más tensión y ocupación a estas estaciones.

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Fuente | Tesla

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