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Toyota se pone, por fin, seria con el coche eléctrico. Primera generación con baterías de Panasonic y segunda con electrolito sólido

Esta semana conocíamos los planes de Toyota de arrancar su programa de coches eléctricos a principios del 2020. Un anuncio que llegaba después de unos años apostando todo por los híbridos, y empujando casi en solitario los modelos a hidrógeno. Pero el mercado está tirando hacia otro lado, y eso les ha obligado a rectificar.

De esa forma el fabricante nipón ha confirmado que a principios de la próxima década, sin concretar fechas exactas, lanzará hasta 10 nuevos modelos eléctricos que se repartirán entre las marcas del grupo, tanto la propia Toyota como por Lexus. Todo en un nuevo plan que pretende ofrecer una versión eléctrica, o al menos híbrida enchufable, de todos sus modelos para 2025.

Ahora sabemos también que Toyota se asociará con Panasonic, que será la encargada de producir las baterías para esta primera generación. Un anuncio que llega pocos meses después de la confirmación de la suma de fuerzas entre la propia Toyota con Denso y Mazda, que invertirán 13.300 millones de dólares hasta 2030 en investigación, desarrollo y fabricación de baterías.

Pero ese movimiento parece destinado a atender el medio y largo plazo. A corto plazo Toyota parece que se ha visto obligada a maniobrar y buscar un socio comercial que le garantice el suministro en cantidad y calidad de baterías.

Según Akio Toyoda, presidente de Toyota «La industria se enfrenta a múltiples retos en el desarrollo de la tecnología de la próxima generación de baterías, lo cual supone un problema para los fabricantes de automóviles y los productores de baterías para que administrarse solos. Sería difícil para nosotros cumplir nuestros objetivos de 2030 dado el ritmo acelerado del desarrollo de las baterías. Es por eso que estamos colaborando con Panasonic y otras compañías para lograr ese objetivo común«.

Con este acuerdo Toyota logra asegurarse el suministro de baterías, y Panasonic firma un poderoso socios que le permitirá incrementar su cuota de mercado en un sector donde gracias a su asociación con Tesla le permite ocupar el 29% del total de ventas de baterías para coches eléctricos.

Lo más curioso es que Panasonic fabricará diferentes tipos de baterías para Toyota y Tesla. Por un lado con los norteamericanos seguirá manteniendo el tradicional diseño cilíndrico, mientras que a Toyota le entregará celdas prismáticas. Preguntado por esto, el presidente de Panasonic Kazuhiro Tsuga, ha admitido que de momento no saben cual de los dos formatos tiene más potencial de futuro.

La conclusión es que Toyota llegará tarde, pero su desembarco sin duda supondrá un impulso a todo el sector desde muchos puntos de vista, desde el publicitario, hasta el tecnológico. Y es que el fabricante nipón es uno de los mayores fabricantes a nivel mundial, y al mismo tiempo es uno de los principales investigadores en la tecnología de baterías del futuro como es el electrolito sólido.

Y es evidente de que si se mete de lleno en el sector, los trabajos en el desarrollo de esas baterías recibirá un impulso para llegar lo antes posible al mercado lo que todo hace indicar será ya en la segunda generación.

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Vía | Forbes

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