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El último accidente del Chevrolet Bolt autónomo nos muestra lo mucho que tiene que mejorar la tecnología

Aunque prácticamente todo el mundo está deseando la llegada del coche autónomo, esta no será ni rápida ni tranquila. Como ejemplo el Chevrolet Bolt que está siendo usado por Cruise Automation, filial de General Motors, que ya acumula un buen historial de incidentes.

Principalmente problemas menores, hasta que hace unos días una unidad del Bolt autónomo arrolló al conductor de una moto en las calles de San Francisco, California. El motociclista ha denunciado al fabricante norteamericano después de que uno de sus modelos autónomos realizase un intento de cambio de carril, llevándose por delante al ocupante de una motocicleta cuando al no poder completar la acción decidió regresar a su posición inicial.

Este vídeo nos muestra que al coche autónomo de Nissan le queda mucho trabajo por delante

Según el atestado del incidente, el conductor de la moto ha sido derribado por el coche, con el resultado de heridas en brazo y hombro. Algo que ha supuesto la puesta en marcha de una denuncia contra el fabricante por parte del usuario que alega incapacidad para poder trabajar.

Desde el fabricante se defienden indicado que el motociclista ha realizado la maniobra de incorporación al carril que abandonaba el Bolt demasiado pronto, y no dejando margen de seguridad.

Lo mejor de todo es que los Bolt autónomos están dotados de una serie de cámaras que recogen todo lo que sucede a su alrededor. Una verdadera caja negra que determinará quién ha tenido la culpa de un incidente que hace el número 13 de una lista de imprevistos de los cuales este es de momento el más grave.

Esto nos indica que la tecnología todavía tiene que evolucionar, pero también que no se trata de un sistema que vaya a eliminar al 100% los accidentes. Sobre todo cuando tendrá que circular en medio de un tráfico mayoritariamente controlado por humanos, que no siempre nos movemos de la forma más lógica y previsible.

Pero pocos dudan de que por cada accidente que provoque un coche autónomo, habrá evitado unos cuantos más al eliminar buena parte del problema en la carretera como es el factor humano. Ahora sólo les queda perfeccionar todavía más el factor robot, para crear unas carreteras mucho más seguras.

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Vía | MN

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