No ha comenzado con el mejor pie la nueva versión del BMW i3, la versión deportiva i3S, que recordamos añade algo más de potencia al ya de por si espectacular sistema del modelo original.
El problema es que la administración de la seguridad en la carretera de los Estados Unidos (NHTSA) ha realizado un aviso de que todos los i3 vendidos en Norteamérica desde 2014, unas 30.000 unidades, tienen un defecto en su parte frontal que le hace perder algunos puntos en los resultados en caso de impacto. Un modelo que recordamos sale de la misma línea de las versiones europeas y que está situada en la localidad alemana de Leipzig.
Esta situación afecta a una pequeña cantidad de conductores, ya que supone según la NHTSA un problema para una conductora mujer, que mide 127 centímetros de alto o menos, con un peso de 45 kilos, y que circule sin cinturón, lo que podría tener efecto en la zona de cuello. Realmente algo muy extraño pero que ha obligado a esta llamada a revisión.
Por supuesto, según la agencia americana los actuales propietarios pueden seguir circulando sin problemas con su coche, y claro, hacerlo siempre con el cinturón de seguridad puesto. Algo elemental, pero que parece que a algunos conductores todavía les cuesta asimilar.
Lo peor de todo es que esta llamada a revisión ha afectado a aquellos que han encargado una unidad de la nueva versión i3S, que según parece tendrán que esperar de forma indefinida hasta que se solucione este defecto. Incluso con muchos con su unidad ya de camino. Algo que no se espera ocurra al menos hasta el mes de enero cuando se espera empiecen a llamar a los propietarios para pasar por el taller.
De momento no tenemos noticias de si este problema afectará a las entregas del i3S en Europa, y estamos esperando la contestación de BMW a esta pregunta.
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Vía | IEVS
