Esta semana se ha firmado un importante acuerdo entre dos de los protagonistas de la nueva era de la automoción. Una etapa donde además de la cada vez mayor importancia de los motores eléctricos, también están avanzando las investigaciones en el sector del coche autónomo.
Ya nadie quiere quedarse atrás, y de esta forma Bosch y Daimler han sellado en Stuttgart un acuerdo de colaboración clave destinado al desarrollo de un sistema de conducción que contará con dos etapas. Una primera en la que se llegará al nivel 4, y una segunda al máximo nivel de autonomía, el nivel 5.
El objetivo es lograr una sinergia que permita desarrollar el software y los algoritmos para el pleno funcionamiento de esta tecnología. El proyecto combina la experiencia de Daimler dentro del sector de los vehículos, con la experiencia con el hardware de Bosch, el mayor proveedor del mundo.
Lo más interesante es que las fechas de esta colaboración indican que para principios de la próxima década debería estar disponible el sistema de nivel 5. Una señal alta y clara de que estamos más cerca de lo que muchos piensan de poder compararnos un coche capaz de conducir sin nuestra ayuda.
Con esta tecnología, sumada al uso de motores eléctricos, se logrará no sólo reducir las emisiones en las ciudades, sino también mejorar la fluidez del tráfico, al mismo tiempo que se incrementan la seguridad en la carretera.
Dos tecnologías que además tendrán otro gran beneficiado, como serán los servicios de car sharing, que además de eléctricos, en pocos años podrán ser autónomos. Algo que agradecerán aquellos que necesiten un coche para su desplazamiento, pero no quieran o no se atrevan a conducir dentro de una ciudad, y que además no tendrá que preocuparte en buscarle un aparcamiento.
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Vía | Damiler
