Si todo sigue el plan, a finales de este mes el Tesla Model S podría lograr alcanzar una marca realmente llamativa. 50.000 unidades vendidas en apenas dos años.
Esto le permite a Tesla situarse casi en los mismos niveles logrados por el Nissan LEAF. Si el japonés paró la cuenta en dos años y dos meses, la berlina de Tesla si logra alcanzar esa cifra este mes de octubre lo hará en dos años y tres meses.
Evidentemente las diferencias entre ambos modelos son enormes. En contra de Tesla está el contar con un producto mucho más costoso, y sobre todo disponer de una red de distribución insignificante si la comparamos con la que dispone Nissan en todo el mundo. Una red que además se ha visto frenada en algunos estados Norteamericanos, por leyes creadas para impedir la venta directa de sus coches.
Pero como decimos, son dos casos diferentes. Lo importante es que estas cifras nos permiten decir que entre las dos marcas han colocado hasta el momento más de 150.000 coches eléctricos en las carreteras de medio mundo.
Una cifra que esperamos sea sólo el principio de una invasión que al menos en el caso de Tesla, marcha viento en popa con la actualización de su fábrica, la ampliación de las infraestructuras europeas y sobre todo, con una gigafábrica de baterías que supondrá un verdadero punto de inflexión.
