A día de hoy, los camiones suponen el 10% de los vehículos que circulan por las carreteras de Estados Unidos, y el 20% de las millas recorridas corresponden a este tipo de medio de transporte. Y sin embargo, el 40% de las emisiones totales son producidas por ellos, por sus enormes motores diésel, su elevado peso y su baja eficiencia.
De acuerdo con el analista de Barclays Michael Cohen, la inmensa mayoría de países comenzarán a adoptar medidas muy restrictivas contra el transporte pesado, algo que podría hacer que la expansión de los camiones, autobuses y furgonetas eléctricos sea mucho más rápida que la de los coches a baterías.
Actualmente, más de 200 grandes ciudades del mundo han anunciado su ofensiva contra la contaminación producida por el transporte pesado. Madrid, París, Londres o México D.F. ya han anunciado que se prohibirá dentro de poco la circulación de vehículos diésel por sus calles, algo que disparará enormemente el interés por la movilidad alternativa.
China por su parte quiere disminuir en un 15% el límite de consumo en el transporte pesado para 2019, mientras que la Unión Europea aprobará en 2018 un nuevo límite más restrictivo de emisiones de dióxido de carbono para este tipo de vehículos.
Sin embargo, Tesla podría estar apuntando al segmento equivocado con el lanzamiento de su Semi, que pretende competir con los camiones de media y larga distancia. Los grandes camiones será los últimos en electrificarse, pues antes irán el transporte público, las furgonetas de reparto urbano y los camiones ligeros de reparto regional.
Realmente, la propuesta de Tesla choca con la de fabricantes como Mercedes, que si bien ha presentado prototipos de camiones eléctricos, por el momento centrará sus propuestas comerciales en furgonetas de todos los tamaños (la pequeña eCitan, la mediana eVito y la gran eSprinter), así como en camiones ligeros (el FUSO eCanter, que ya se ha puesto a la venta en Estados Unidos).
¿Se habrá equivocado Tesla en su apuesta por el Semi? Quizás la marca californiana debería plantearse añadir a su gama alguna furgoneta de reparto o un camión ligero, pues parece que el despegue del Semi será más lento de lo que podrían haber previsto.
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Fuente | CNBC
