Durante la apertura del Salón del Automóvil de Frankfurt, el presidente de Volkswagen ha presentado el que han catalogado como la iniciativa de electrificación más completa en la industria del automóvil mundial. Un proyecto que pretende movilizar más de 70.000 millones de euros en los próximos ocho años para crear una amplia oferta a nivel de vehículos, y además lograr contar con el suministro de baterías necesario.
Sin duda la parte más llamativa es el incremento de la oferta de vehículos. Según el fabricante alemán para 2025 habrá disponibles un total de 50 modelos eléctricos puros a disposición entre todas las marcas del grupo (Audi, Bentley, Bugatti, Lamborghini, Porsche, SEAT, Škoda, Volkswagen). A estos se sumarán 30 híbridos enchufables.
Una amplia oferta que supondrá que al menos habrá una versión eléctrica de cada uno de los diferentes modelos que forman la oferta del grupo. Algo que supondrá una amplia variedad de propuestas, desde urbanos, compactos, hasta berlinas y todocaminos.
Esta parte del plan movilizará unos 20.000 millones de euros y se invertirán en el desarrollo de dos nuevas plataformas diseñadas para coches eléctricos, además de en la mejora de las instalaciones y las fábricas y en la formación de la mano de obra. Pero también en la red de recarga pública, así como mejorar la capacidad de los puntos de ventas.
Pero para alimentar una demanda tan amplia, harán falta baterías, y muchas. Según las estimación de Volkswagen para 2025 serán necesarios unos 150 GWh al año para atender las necesidades de todas sus marcas. Una cifra monumental que requerirá no sólo un incremento exponencial en la producción de los suministradores, sino también la puesta en marcha de instalaciones propias.
Para situarnos, sería la producción completa de cuatro Gigafábricas de Tesla una vez terminada. Un proyecto que supondrá la inversión de algo más de 50.000 millones de euros. Una inversión histórica.
Volkswagen abordará la producción de baterías en varias fases. En una primera seguirá apoyándose en los suministradores externos. Pero a medio y largo plazo esperan poder desarrollar y fabricar sus propias baterías. Para ello pondrán en marcha un centro de I+D en la localidad de Salzgitter, donde investigar nuevas soluciones. Una actividad la de producir baterías en la que el grupo ya está trabajando con las primeras líneas experimentales con las que prepararse de cara al futuro.
Según Matthias Muller, presidente de Volkswagen «Hemos recibido el mensaje y hemos tomado nota. Esto no es una sencilla declaración de intenciones. Es un auto-compromiso con el que desde hoy, marcamos el objetivo de nuestra ambición. La transformación de la industria es imparable, y vamos a liderar este cambio«.
El objetivo es que para 2025 uno de cada cuatro coches que se vendan dentro del grupo sean eléctricos. Algo que supondrá unas ventas de entre 2 y 3 millones de unidades cada año. Un salto adelante muy importante que de momento está en los papeles, pero que sin duda sólo su simple presentación hará que la competencia revise sus cifras para no quedarse atrás.
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Fuente | VW
