La llegada el pasado año del Hyundai Kona eléctrico supuso un fuerte impacto, al convertirse en el primer coche de amplia autonomía que lograba llegar al mercado con un precio mínimamente terrenal. Algo que sucedía en un momento donde la demanda crecía de forma imparable gracias a factores como la entrada en vigor de los nuevos ciclos de homologación europeos, o la puesta en marcha de la prohibición de acceso a muchas ciudades a los coches diésel.
El resultado ha sido unas ventas que sólo en Europa llegaron a las 11.000 unidades. Una cifra que el director de marketing de Hyundai, Wonhong Cho, admite ha superado todas sus expectativas para este modelo, que indica tiene más de 30.000 pedidos sobre la mesa para atender.
El principal problema ha sido precisamente la falta de planificación y previsión. Y es que a factores como el ser un eléctrico de amplia autonomía, y contar con un motor potente y un sistema de carga más que solvente, el Kona se sitúa en un segmento en plena explosión comercial en Europa. Los todocaminos compactos. Algo que ha ayudado a multiplicar la demanda.
Ahora el Sr Wonhong Cho ha indicado que trabajan con sus suministradores, principalmente con LG, que se encarga de sus baterías, para solucionar en la medida de lo posible un problema que ha situado a la producción muy por debajo de la demanda, lo que se está traduciendo en largas esperas para hacerse con una unidad, y que en algunos casos llega a los 6 meses.
De momento no han querido dar cifras estimadas de producción para este 2019, y que los rumores indican llegará a las 4.000 y 5.000 unidades al mes, lo que permitirá sacar adelante este año entre 50.000 y 60.000 unidades para todo el mundo. Un número que de nuevo se quedaría muy por debajo de una demanda que por otro lado tendrá otras opciones similares a las que derivarse, como el propio KIA Niro, que arrancará sus entregas en marzo, o el KIA Soul, que lo hará poco después.
Vía | Autonews
