Muchos son los fabricantes que cada vez más, se unen a la movilidad eléctrica con el objetivo de reducir las emisiones en los centros de las ciudades y en el transporte público. Volvo, es una de esas marcas que además, cuentan con una dilatada experiencia en autobuses eléctricos e híbridos que ya circulan desde hace años por las diferentes ciudades del mundo.
La compañía sueca ha presentado el nuevo Volvo 7900, un autobús totalmente eléctrico y articulado que permite realizar trayectos de transporte público con más capacidad de pasajeros que otros autobuses, haciéndolo al mismo tiempo sin emitir ruido o emisiones a la atmósfera.
Volvo Buses anunció que presentará de forma oficial el próximo otoño este autobús totalmente eléctrico articulado con espacio para hasta 150 pasajeros. El nuevo autobús articulado se basa en los prototipos que se están probando desde junio de 2018 en la ruta 16 de alta frecuencia en Gotemburgo, Suecia. Hasta ahora, dos autobuses prototipo han funcionado durante 4500 horas y han recorrido más de 62 000 kilómetros, con un excelente tiempo de funcionamiento.
El Volvo 7900 articulado estará disponible en dos longitudes, una de 18 metros y otra de 18,7 metros, que podrán adaptarse a las diferentes aplicaciones de cada ciudad. Sus baterías se cargarán en puntos de carga rápida, que se situarán en los finales de ruta o en las cocheras a través de una carga nocturna, cuando el autobús no se utilice. Utilizará el tipo de carga CCS. Volvo no ha anunciado la autonomía que tendrá este modelo 7900.
Los autobuses eléctricos son una gran forma de reducir las emisiones de los centros de las ciudades, eliminando la necesidad de utilizar autobuses diésel tradicionales, más contaminantes y ruidosos. Es una transición que ya se está llevando a cabo en muchas ciudades del mundo, incluyendo entre ellas, Barcelona. La ciudad condal cada vez cuenta con más autobuses eléctricos y tiene nuevos en camino.
Según la marca sueca, el Volvo 7900 eléctrico articulado ahorrará hasta un 80% más de energía que un autobús diésel de similares características. Esto se traduce en un gran ahorro económico para los ayuntamientos que elijan este tipo de transporte público, además de una enorme reducción de las emisiones y del ruido, haciendo más cómoda la vida en una ciudad también más limpia.
Queda claro que con el creciente aumento de los autobuses eléctricos en las diferentes ciudades, el futuro del transporte público pasa por utilizar este tipo de autobuses de cero emisiones. Aunque muchas ciudades aún continúan utilizando autobuses diésel o de gas natural, es de esperar que vayan siendo sustituidos poco a poco por autobuses eléctricos o híbridos enchufables.
Fuente | Volvo
