Hace apenas unos días Bernd Koerber, jefe de la marca MINI, anunció la próxima generación del MINI Hatch podría ser más pequeña y completamente eléctrica desde su lanzamiento, previsto para principios de la década que viene. De acuerdo con el ejecutivo, este nuevo MINI Hatch no será un remake del prototipo MINI Rocketman, sino que retomará la filosofía del MINI Hatch original de 2001, que medía 3,63 metros de largo. Este hecho supondrá el regreso de MINI al segmento A (vehículos urbanos), mientras que el MINI Hatch de 5 puertas se mantendrá en el segmento B (vehículos utilitarios).
Sin embargo, parece que MINI no será la única en tomar como referencia al primer MINI Hatch para sus futuros modelos: el jefe de diseño de Mercedes-Benz, Gorden Wagener, quiere que los próximos Smart también se inspiren en el diseño del MINI Hatch original. Unas declaraciones cuanto menos curiosas teniendo en cuenta que los vehículos de Smart hasta ahora han sido radicalmente diferentes en su planteamiento a los de MINI.
Actualmente, Smart es controlada al 50% por Daimler (Mercedes-Benz) y Geely (Volvo, Polestar, Lotus, Lynk & Co…). Sus próximos modelos se fabricarán en una planta china especialmente construida para la marca, abandonando por completo la producción en Europa. Mientras que Daimler se encargará del diseño de los vehículos, Geely será la responsable del apartado técnico.
Si bien los próximos modelos de Smart serán los Fortwo de cuarta generación y Forfour de tercera, situados en el segmento A y previstos para 2022, tras ellos llegará un utilitario del segmento B (¿Forfive?), que al igual que el resto de la gama del fabricante alemán, será 100% eléctrico. Smart no cuenta con un utilitario desde la desaparición de la primera generación del Forfour (2004-2006). Aunque todavía no se conoce ningún dato técnico del nuevo Smart «Forfive», es posible que comparta soluciones técnicas con el próximo Volvo XC20.
De acuerdo con Wagener, «el punto clave es que la sensualidad vende, y en ese sentido busco inspiración en esos primeros MINI. Hubo una simplicidad, una voluptuosidad que les dio un atractivo único, y el desafío es obtener ese tipo de formas sin hacer crecer el automóvil demasiado o hacer que parezca demasiado pesado. Estamos en el comienzo del proceso ahora con Geely, pero sabemos en qué dirección queremos ir. Smart ha crecido como marca, ya no es un niño, y puede ser más sexy, tener un estilo más deportivo».
Fuente | Autocar
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