Ford está desarrollando un coche eléctrico con Rivian

Tras unos años en los que la apuesta de Ford por el coche eléctrico fue meramente anecdótica (la firma americana solo ofrecía el Focus EV, una versión a baterías de su popular compacto global), parece que la marca del óvalo parece dispuesta a convertirse en un fabricante de vehículos a baterías competitivo de la mano de una ingente inversión de capital.

Así, Ford destinará un total de 11.500 millones de dólares para lanzar hasta 40 vehículos electrificados para 2022, de los cuales 16 serán 100% eléctricos. Para lograr estos ambiciosos objetivos, la marca seguirá tres caminos diferentes: el desarrollo de coches eléctricos con tecnología propia, así como de proyectos conjuntos con Volkswagen y Rivian.

Rivian saltó a la fama hace unos meses tras la presentación de sus dos primeros modelos, el SUV de gran tamaño R1S y la pick-up R1T, ambos 100% eléctricos y con 660 km y 640 km de autonomía real respectivamente. La tecnología de Rivian ha captado la atención de la industria, hasta el punto de que Amazon ha decidido invertir en ella. Además, marcas como Pininfarina están interesadas en utilizar su plataforma modular eléctrica para desarrollar sus propios SUV de altas prestaciones.

Así, Ford ha invertido un total de 500 millones de dólares en Rivian; a cambio, podrá emplear su plataforma de tipo skate-board, sus motores eléctricos, baterías, esquemas de suspensión, etc. Por otro lado, Ford también se beneficiará del know-how de la marca en materia de electrónica, lo que permitirá a la firma ser más competitiva de cara al futuro.

Aparentemente, el modelo que desarrollará Ford con Rivian no será una pick-up, pues ya se encuentra desarrollando su propia F-150 eléctrica. Por lo tanto, los rumores apuntan a un SUV de gran tamaño equivalente al Rivian R1S que se situaría dentro de la gama Ford en el mismo segmento que el famoso Explorer, el cual llegará en unos meses a Europa de la mano de su variante híbrida enchufable. Aparentemente, el vehículo será ensamblado por Rivian y no por Ford a pesar de venderse con los logos de la histórica marca americana.

Respecto a su asociación con Volkswagen, Ford se beneficiará de la plataforma modular eléctrica MEB del grupo alemán para desarrollar sus propios vehículos; a cambio, Volkswagen encargará el desarrollo de sus vehículos industriales y pick-ups a Ford. El primer Ford basado en la plataforma MEB será un coche de pequeño tamaño y tracción delantera que comenzará a fabricarse en Europa en 2023; más tarde se le unirá un segundo modelo. Ambas empresas también colaborarán en materia de conducción autónoma a través de la empresa conjunta Argo.

En cuanto a su tecnología propia, más allá de la F-150 eléctrica Ford ha confirmado el lanzamiento del SUV de altas prestaciones Mach E, que llegará en 2020 con una estética inspirada en el Mustang y 600 km WLTP de autonomía.

Fuente | Motor Trend

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