Durante una presentación en vídeo en Shanghái, Elon Musk ha vuelto a hablar del desarrollo de la conducción autónoma, regresando al discurso de que su desarrollo está avanzando de una forma muy rápida. Tanto que ha asegura que están muy cerca de lograr completar el diseño de los sistemas que permitan alcanzar el máximo nivel de autonomía este mismo año.
Según Musk: «Estoy extremadamente seguro de que lograremos llegar al Nivel 5, lo que supone una autonomía esencialmente completa, y creo que sucederá muy rápidamente. Estoy seguro de que tendremos la funcionalidad básica para el Nivel 5 completo este mismo año«.
Por supuesto las palabras de Musk hay que ponerlas en un contexto donde el desarrollo del software y el hardware es una cosa, y otra cosa es lograr su aplicación en condiciones reales donde estos funcionen de forma perfecta en las millones de situaciones que una flota de vehículos autónomos debe enfrentarse.
También está la cuestión de la regulación pública, que tendrá que evolucionar tendiendo en cuenta las diferentes opiniones de cada gobierno y cada mercado, terminando por lograr la aceptación del público que necesitará un periodo de transición hasta comprobar el potencial de este tipo de sistemas.
Un Nivel 5 que como recordamos supondrá una automatización plena, en la que además de vehículos capaces de moverse sin la presencia de una persona en su interior, podrán contar con características como el prescindir de elementos como el volante o los pedales. Algo que de nuevo tendrá que lidiar con la cuestión de las regulaciones públicas.
La pregunta es el cuándo. Aunque Elon Musk asegura que será muy pronto, desde la Unión Europea se ha estimado que no será hasta 2030 cuando los primeros vehículos de nivel 5 lleguen al mercado. Un periodo de 10 años en los que los organismos públicos tendrán que adaptarse de forma drástica con la llegada de los niveles 3 y 4, que supondrán cambios muy profundos al permitir al conductor desatender las labores de supervisión del vehículo, y que tendrá que venir acompañado de cambios en las normativas de tráfico que por ejemplo, obligan a llevar las manos en el volante.
Un gigantesco negocio donde las grandes tecnológicas se están jugando un pastel multimillonario, que según el informe del banco de inversiones Citi en su estudio ‘Car of the Future v4.0‘, este mercado alcanzará para el año 2.030 la cifra de 87.000 millones de euros al año.
Este abarcará desde la venta de vehículos, pero sobre todo el mercado profesional con flotas de taxis autónomos, hasta vehículos por suscripción que moverán ingentes cantidades de dinero en una sociedad cada vez menos propensa a la propiedad de los coches.
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Vía | Autonews
