La marca estadounidense Jeep, especializada en la fabricación de SUV y todoterrenos, cuenta a día de hoy con la gama más extensa de su historia, con una oferta que va desde el pequeño Renegade (segmento B) hasta el opulento Grand Cherokee (segmento E), pasando por el icónico todoterreno puro Wrangler o la nueva pick-up Gladiator.
A pesar de todo, la marca no tiene previsto dormirse en los laureles, por lo que en los próximos años renovará por completo su alineación mediante una firme apuesta por la electrificación y la adición de modelos inéditos como un nuevo SUV situado por debajo del actual Renegade. Este modelo será de hecho el primer Jeep en contar con una mecánica 100% eléctrica.
Aunque está previsto que otros modelos de la firma como el Wrangler reciban a corto plazo versiones eléctricas, el «baby Jeep» será el primero en contar con una configuración de este tipo. En un principio el vehículo se fabricará en Melfi, Italia, si bien no se descarta que también llegue a producirse en suelo estadounidense.
De tamaño ligeramente superior al actual Suzuki Jimny, el nuevo SUV pequeño de Jeep estará enfocado principalmente al mercado europeo. Aunque no está confirmado, se espera que el modelo haga uso de la plataforma modular CMP de PSA (Peugeot-Citroën, Opel), grupo con el que FCA se fusionará a principios de 2021 para formar el gigante Stellantis, que se convertirá en el cuarto mayor fabricante de automóviles del mundo.
A pesar de que la plataforma CMP cuenta con una variante eléctrica e-CMP, lo cierto es que en un principio no está preparada para acoger sistemas de tracción total. Sin embargo, gracias al pequeño tamaño de los motores eléctricos y al hecho de que este tipo de automóviles no necesitan túnel de transmisión, posiblemente la plataforma CMP pueda acoger fácilmente versiones 4×4 electrificadas, lo que convertiría al pequeño modelo en un Jeep de pleno derecho.
Actualmente los modelos asentados sobre la plataforma e-CMP cuentan por norma con un motor eléctrico de 136 cv (100 kW) de origen Continental, con una batería de 50 kWh de capacidad bruta con celdas CATL y refrigeración líquida, y con la capacidad de cargar a 11 kW en alterna y a 100 kW en continua. Sin embargo, más adelante la plataforma evolucionará para acoger motores Nidec y celdas Saft, mejoras que posiblemente lleguen desde el principio al «baby Jeep».
Fuente | Jalopnik
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