A día de hoy, la marca alemana Smart pertenece a partes iguales a Daimler (Mercedes-Benz) y a Geely (propietaria de Volvo, Polestar y Lotus) después de que el gigante chino se hiciera el año pasado con el 50% de las participaciones en la firma. Aunque este movimiento ha permitido asegurar el futuro de Smart, tendrá varias consecuencias a corto plazo.
La primera de ellas será el cese de la fabricación de los modelos de la compañía en Europa: a partir de 2022, los Smart se producirán exclusivamente en China para todo el mundo. De hecho, las oficinas centrales de la empresa se trasladarán a Hangzhou, mientras que la fábrica francesa de Hambach será vendida al mejor postor (posiblemente Ineos).
Aunque Daimler seguirá ocupándose de aspectos como el diseño de los modelos de Smart, será Geely la que se encargue del apartado técnico de los vehículos, posiblemente empleando tecnología eléctrica de origen Volvo. Está confirmado que en 2022 se lanzará una nueva generación de los fortwo, fortwo Cabrio y forfour, todos ellos ubicados en el segmento A (urbanos).
Sin embargo, Smart también tiene el objetivo de expandirse al segmento B (utilitarios) de la mano de un SUV eléctrico con el que la marca posiblemente vea sus ventas incrementarse de forma exponencial, pues pertenecerá a un segmento en pleno apogeo. Gracias a este modelo, la rentabilidad de la compañía estará más que asegurada.
Algunos rumores apuntan a que el SUV de Smart podría compartir plataforma con el hipotético Volvo XC20, un modelo que la firma sueca estaría desarrollando con el objetivo de competir contra el Audi Q2 L e-tron (una versión eléctrica y alargada del Q2 vendida en China), así como contra el futuro MINI Countryman, que posiblemente tenga variantes 100% eléctricas.
Por el momento se desconoce la denominación comercial que tendrá este modelo, si bien algunos rumores apuntan al nombre «forfive», siguiendo el clásico sistema de nomenclaturas de la marca. Al igual que los nuevos fortwo y forfour, el forfive verá la luz en el año 2022, y se venderá tanto en China como en Europa, los principales mercados de coches eléctricos del mundo.
Fuente | Motor.es
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