Desde su época integrada en el Grupo General Motors, Opel ya trabajaba en el desarrollo de un sistema a hidrógeno destinado a electrificar el transporte. Unos trabajos comenzados hace más de 20 años que en 2021 vivirán un nuevo capítulo con el lanzamiento de la nueva generación que será montada en una flota de Opel Zafira.
Ahora integrada en el grupo PSA, Opel quiere aprovechar la experiencia acumulada en las últimas dos décadas para poner en marcha la cuarta generación de su sistema que ha sido desarrollado en sus instalaciones de Rüsselsheim y que sigue los pasos de otros fabricantes, como Hyundai, que exploran todas las posibilidades de electrificación, desde los micro híbridos, los híbridos enchufables, eléctricos a batería y a hidrógeno.
De momento desde Opel no se han dado detalles técnicos de la quinta versión del sistema de pila de combustible, que en la anterior contaba con un motor de 93 kW (127 CV) que se alimentaba de un depósito de 4.2 kilos de capacidad comprimido a 700 bares, que permitía a los prototipos alcanzar una autonomía de 420 kilómetros con cada carga.
Una cifra que podemos comparar con os 400 kilómetros que lograba en 2001 Opel y General Motors con la primera generación del sistema. Algo que nos indica al falta de conocer los datos de la última versión, que las prioridades de los desarrolladores de este sistema no ha sido la autonomía sino la reducción de costes que para los directivos de la marca es la principal barrera para su entrada al mercado.
Una Opel que cuenta con una versión eléctrica a batería de la propia Zafira, con baterías de entre 45 y 75 kWh útiles, y autonomías de hasta 330 kilómetros bajo el ciclo WLTP. Unos modelos que tampoco son precisamente baratos, con precios desde los 50.000 euros para la variante más económica.
Esto hace que la variante a hidrógeno, al menos de momento, se convierta en un capítulo más del proyecto de investigación y una base para el desarrollo de soluciones para el sector profesional. Ya que está claro que a nivel de precio no puede competir con los sistemas a batería, mientras que en autonomía la diferencia se recorta de forma alarmante cada año.
¿Tendría sentido una versión a hidrógeno de la Zafira? Posiblemente no a la vista de los movimientos de la mayor parte de los fabricantes que han parado sus trabajos en vehículos ligeros, centrando sus esfuerzos en ofrecer alternativas en el sector del transporte pesado, lo que nos indica que esta investigación después de más de 20 años, todavía tiene por delante unos pocos más para llegar de forma comercial al mercado.
