Los problemas para Nikola se siguen acumulando. Tras las acusaciones de fraude vertidas por Hindenburg Research, la startup ha visto sus acciones desplomarse y como General Motors descartaba la producción conjunta de la pick-up eléctrica Badger. Ahora la compañía ha anunciado que se ha visto obligada a cancelar un importante contrato de suministro de camiones de basura eléctricos.
A principios de año, Nikola y Republic Services anunciaron un proyecto conjunto a través del cual diseñarían y construirían un camión de basura completamente eléctrico. Los motivos esgrimidos por Nikola para cancelar esta interesante iniciativa son cuanto menos llamativos, pues la empresa sostiene que el desarrollo sería demasiado largo y costoso.
«Después de una revisión considerable, ambas compañías determinaron que la combinación de las diversas tecnologías nuevas y conceptos de diseño darían como resultado un tiempo de desarrollo más largo del esperado y costes inesperados. El programa terminará, dando como resultado la cancelación del pedido previamente anunciado«.
Compañías como BYD, Daimler (Mercedes-Benz), Mack y Volvo Trucks ya están trabajando en sus propios camiones de basura eléctricos, si bien la colaboración de Nikola y Republic Services era una de las más ambiciosas de este tipo. En los próximos años, se espera que los camiones de gestión de residuos con propulsión eléctrica cuenten con una importante demanda en las grandes urbes de todo el mundo.
La cancelación de esta colaboración bien podría considerarse una prueba más de que, como afirma Hindenburg Research, Nikola en realidad no cuenta con tecnología propia y depende por completo de sus tratos con General Motors e IVECO. Por lo tanto, no sería de extrañar que en los próximos meses la startup siguiera cancelando proyectos.
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