¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

Tesla intentará reducir los errores de producción con un nuevo sistema de supervisión por cámara

Tesla ha lanzado una oferta de trabajo para un ingeniero que se encargará del diseño e instalación de un sistema de inspección de cámara automatizada para supervisar las líneas de ensamblaje de su fábrica de California. Un paso que buscará reducir el problema de los fallos de producción de unidades que están llegando en algunos casos en condiciones lamentables a sus clientes.

Esta tecnología no es nueva, y diferentes marcas las llevan usando para agilizar las líneas de producción y reducir los errores de ensamblado o problemas de suciedad que puedan estropear procesos clave como el pintado. 

Uno de ellos es Ford, que en 2008 implantó en su fábrica de Almussafes un sistema desarrollado por el Instituto de Diseño y Fabricación de la Universidad Politécnica de Valencia, dotado de 12 cámaras procedentes del fabricante danés JAI Cameras, capaces de capturar 15 imágenes por segundo para crear el modelo 3D del vehículo y detectar cualquier imperfección no prevista en el diseño del coche.

Con este movimiento, Tesla busca solucionar uno de sus principales problemas no solo en el aspecto técnico, sino en su reputación. Y es que cualquier pequeño problema que suceda a una unidad tiene una repercusión mundial. Algo que les deja poco margen de maniobra y requiere de unos controles más exigentes.

Pero no es sólo que los problemas tengan más magnitud por ser Tesla, sino que incluso entre los análisis de los expertos, como el ranking de fiabilidad de la consultora JD Power, Tesla se ha colocado en la última posición. Algo que antes o después, le afectará en su imagen y ventas.

Una nueva oportunidad para Tesla de dar un salto adelante y donde poder aprovechar los avances en tecnologías como la inteligencia artificial, que podrán ayudarles a mejorar unas tasas de errores que están lastrando la fábrica de California, que se coloca incluso muy por debajo en fiabilidad de la de planta de Tesla en Shanghái, con unas tasas de fiabilidad constructiva superiores. 

Una tecnología que además de vehículos mejor acabados, y sin fallos como techos voladores o piezas sin encajar, permitirá acelerar las líneas de producción. Un aspecto clave que permitirá sacar el máximo partido a cada instalación y lograr alcanzar el objetivo de llegar a las 800.000 unidades este año.

Relacionadas

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame