Tesla ha recibido el permiso del Comité de Gestión de Construcción y Desarrollo del Área de Lingang, Shanghái, para comenzar el proyecto de ampliación de su fábrica china. Un espacio de donde saldrá su modelo más económico. Una propuesta que situará su precio en torno a los 20.000 euros, y del que incluso ya se rumorea su fecha de presentación.
Según los medios chinos, este nuevo permiso supone la aprobación del inicio de una Fase 2 para la fábrica, donde comenzaría la producción del nuevo modelo. El informe de impacto ambiental de Tesla muestra que se han agregado al proyecto procesos de fabricación como estampado, pintura, soldadura y ensamblaje final de vehículos eléctricos. Una vez completado, el proyecto agregará instalaciones de fabricación para el Model 3, el Model Y, además de «modelos derivados relacionados».
El proyecto llevará a cabo pruebas relacionadas con el lanzamiento de un nuevo modelo, más que posiblemente relacionándose al modelo económico, además de trabajos de investigación, incluyendo pruebas de equipos importantes y procesos de fabricación. Según el documento, el ciclo de prueba es de aproximadamente seis meses para la verificación, coordinación de piezas y funciones, etc.
De confirmarse, esto supondría que la línea de producción estaría lista en el segundo semestre, y podría comenzar a ensamblar vehículos antes de terminar el año. Justo antes de finalizar un 2021 que será cuando se debería presentar una propuesta que arrancará las entregas a principios de 2022.
Los medios locales incluso indican que el precio de esta nueva propuesta, diseñada por el equipo de China Design Team de Tesla, tendrá un precio de salida de 160.000 yuanes, que al cambio actual son 20.570 euros. Una cifra que de confirmarse, y se acompaña de unas prestaciones decentes, se habla de una autonomía desde 350 o 400 km, sin duda supondrá un antes y un después para la marca americana.
Y es que la opinión de muchos de que entrando en los segmentos menos premium podría perjudicar a Tesla a nivel de imagen y de rentabilidad, la respuesta de que esto no tendría que pasar lo tenemos en marcas como Volkswagen, que ha extendido una oferta que va desde el Polo hasta el Arteon.
Un Model 2, nombre no oficial, que permitirá cimentar las bases Tesla que expandirá su gama en una variedad de segmentos, berlinas, SUV, compactos, lo que les permitirá contar con más flexibilidad para atender las necesidades del mercado en cada momento, y con un volumen cada vez más elevado lo que tendrá un impacto en los costes de producción importante.
Una noticia que se entrelaza con la del rumor de compra del 20% de BYD, que les permitiría acceder a las económicas celdas LFP de los chinos, muy importantes para hacer rentable un coche de estas características.
Fuente | Auto Sin
