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Xiaomi también se apunta a intentar fabricar un coche eléctrico

El éxito de Tesla y su apuesta por el coche eléctrico, además de todo su ecosistema, ha inspirado a muchos de los gigantes tecnológicos a intentar diversificar su actividad hacia los automóviles. Tenemos el caso de Apple, que no logra encontrar quién se lo fabrique, y ahora también podemos añadir a la lista a Xiaomi.

Según los medios chinos, varias fuentes han declarado que el gigante tecnológico está planeando construir su propio automóvil y lo está considerando como una decisión estratégica que irá más allá de anuncios como los de Huawei, que se centrará en el desarrollo de componentes para otras marcas.

De momento no hay muchos detalles pero las fuentes consultadas también afirmaron que a pesar de que de momento no hay nada firmado, que el proyecto vaya a ser dirigido directamente por el fundador y director ejecutivo de Xiaomi, Lei Jun, otorga más credibilidad y posibilidades a la iniciativa.

Y es que el propio Lei Jun ha llegado a reunirse personalmente y al menos dos veces con Elon Musk en 2013. Unas reuniones que en su momento no han trascendido y que podrían ser la semilla que ha hecho crecer el interés del ahora gigante tecnológico asiático que como muchas otras compañías del sector, se enfrenta al estancamiento en ventas después de un fulgurante crecimiento y que choca con la dinámica contraria del coche eléctrico que mantendrá su línea ascendente en las próximas décadas.

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Por lo tanto, no sería una sorpresa total si la compañía tiene como objetivo expandir su presencia en un mercado todavía con espacio para más competencia, decide sacar el máximo partido a su enorme equipo de I+D para ampliar horizontes hacia el coche eléctrico. Teniendo además a mano una potente industria de fabricación de vehículos con cada vez más experiencia con los modelos eléctricos. Una combinación ganadora sin duda.

De momento no hay detalles de cómo discurrirá el proyecto. Si Xiaomi comenzará una marca desde cero, o de lo contrario adquirirá alguna ya en funcionamiento. En el caso de NIO o Xpeng, la propia Xiaomi tiene inversiones minoritarias que supondría un desembolso ahora mismo inasumible por el elevado precio que han alcanzado los títulos de las dos marcas. Algo que junto con la facilidad de recaudación de ambas, hace este posibilidad un imposible.

Un ejemplo de las dificultades que tendrá que enfrentar Xiaomi si quiere subirse a un tren que circula a toda velocidad, y donde cada día que pasa tendrá que invertir más dinero si quiere subirse en los vagones de cabeza, pero que le permitirá aplicar una de las máximas de la compañía como es la diversificación, y que le ha llevado a fabricar casi de todo lo fabricable más allá de teléfonos.

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Fuente | iFeng

 

 

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