¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

¿Cómo afectará la apertura de la red de supercargadores a otras marcas a los clientes de Tesla?

Esta madrugada nos hacíamos eco de la exclusiva que llegaba desde Estados Unidos que anunciaba la inminente apertura de la red de carga de Tesla a terceras marcas. Tras el anuncio muchos de los propietarios y primeros clientes de la marca de Palo Alto puede que no vean con tan buenos ojos esta noticia.

La red de carga de Tesla ha sido desde el principio uno de los baluartes de la marca y un elemento diferenciado respecto al resto de coches eléctricos en venta.

La frase que muchas veces se escucha «yo tengo un Tesla» cuando se habla de los problemas de muchos usuarios para acceder a una red de carga completa y capilar, muestra la sensación de seguridad, confianza y autosuficiencia del propietario de un coche eléctrico de la marca estadounidense, que se sabe capaz de cruzar todo el continente europeo sin tener que preocuparse lo más mínimo por la red de carga.

¿Y ahora qué?

La seguridad que aporta la red de supercargadores Tesla no tienen igual en ninguna parte del mundo. Este punto a favor ha sido un elemento que en muchas ocasiones ha determinado para muchas personas la compra de un Tesla frente a otras alternativas.

Saber que el coche es capaz de determinar dónde hay que parar y cuánto tiempo, siempre que se el indique el punto de destino (esto ni tan siquiera es necesario si en calendario del teléfono móvil está incluido este dato).

Esto garantiza que los móviles de los usuarios no necesitan llenarse con un sin fin de aplicaciones, para poder garantizar que llegaremos a tiempo a nuestro punto final de la ruta.

Pero para muchos, la apertura de la red a terceras marcas puede distorsionar la experiencia de uso para los propietarios de Tesla que saben que pueden contar en exclusiva y sin excesiva saturación, la mayor red de carga del mundo.

¿Beneficio o perjuicio?

La apertura a terceros representa ‘compartir’ un recurso escaso con múltiples usuarios, lo que puede hacer que los propietarios que apostaron por la marca se encuentren sus puntos de carga ocupados.

Para Tesla esta puede ser una oportunidad de optimizar su red, acceder a ayudas y recuperar una inversión más rápidamente, pero para los usuarios de la marca de Palo Alto puede no ser un aliciente.

Puede que un propietario que ha desembolsado 140.000 euros por un Model X Plaid no se sienta muy satisfecho con su compra, si a la hora de parar a carga en un largo viaje se encuentra las plazas de los supercargadores ocupados por un Dacia Spring, un Volkswagen ID.3 o un Hyundai Kona que no es capaz, este último, de superar los 70 kW de potencia de carga.

¿Cómo funcionará la apertura?

Los tiempos de carga son quizás en aspecto más tedioso de la experiencia a bordo de un coche eléctrico, y encontrarse con un cargador ocupado puede demorar hasta más de una hora el tiempo de carga, si hay que esperar a que este quede libre.

De momento se desconoce como será la apertura de los cargadores, si serán todos accesibles para todos los coches o solamente una parte de cada estación de carga estará reservada a vehículos no Tesla, como sucede con los puntos de carga en destino (Destination Charger) de Tesla.

Hasta que Noruega no arranque en 2022 con la apertura de la red e Tesla, de momento lo único que podemos hacer es especular por las reacciones del mercado y las partes implicadas.

Desde FCE abrimos el debate para conocer las ideas y opiniones de nuestra audiencia sobre este asunto que, seguramente, traerá consigo cierta polémica una vez comience a implementarse la apertura de la red de supercargadores de Tesla.

Relacionadas | El mayor centro de recarga de coches eléctricos de Europa estará en el Reino Unido y contará con puntos de Fastned, EDF Renewables, Tesla y Wenea

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame