Cuando Volkswagen lanzó al mercado el ID.3 y posteriormente el SUV ID.4, una de las opciones más interesantes a la horma de configurar cualquiera de los dos vehículos cero emisiones era una bomba de calor capaz de mejorar un 30% la autonomía a -25ºC.
Una vez que el ID.3 ha pasado su primer invierno tras su lanzamiento a nivel europeo, los resultados obtenidos por los propietarios distan mucho de la realidad anunciada a bombo y platillo por la web del fabricante alemán.
La promesa de una mayor autonomía a cambio del pago por un extra que forma parte del equipamiento de serie de muchos coches eléctricos del mercado, provocó que 56.230 clientes se decantaran por este sistema de climatización para su coche eléctrico.
Una opción que no cumple
El precio pagado, según reportan medios germanos, es de 1.250 euros. A pesar de que según Volkswagen la eficiencia y autonomía depende mayoritariamente del conductor. Los datos reales de autonomía de la vida real han terminado por mejorar las previsiones del grupo alemán para los automóviles con los que busca ser relevante en el sector del coche eléctrico.
De hecho el fabricante no ofrece más información sobre la mejora de autonomía que la bomba de calor puede proporcionar a quien se decida a solicitarla. De todos modos y siempre en función del perfil de conducción, se estima que el rango de mejora real pueda estar en torno a un 15%.
¿Y ahora qué?
Tras las polémica, Volkswagen ha decidido que a partir del 1 de julio de 2021 el precio de la opción de la bomba de calor descenderá hasta los 990 euros (260 menos que hasta ahora en Alemania).
El precio de la bomba de calor en el ID.4 en España es de 1.275 euros en la actualidad. En el ID.3 esta opción asciende a 1.360 euros.
Para aquellos clientes, en concreto 56.230, que han comprado uno de los coches eléctricos nacidos de la plataforma MEB desde 2020 hasta la fecha, Volkswagen les abonará un importe de 285 euros.
En total el grupo alemán tendrá que abonar alrededor de 16 millones de euros como compensación por no haber cumplido con las especificaciones ofrecidas inicialmente.
Los fabricantes deben pagar
Esta decisión tomada por parte de Volkswagen se suma a las últimas noticias de respuesta, por parte de los fabricantes de coches eléctricos, ante problemas surgidos tras la venta de sus coches cero emisiones.
Recientemente Tesla, esta vez por sentencia judicial que no por propia iniciativa, se ha visto obligada a pagar 13.000 euros a los propietarios a los que ha reducido la velocidad de carga junto con la autonomía de sus Tesla Model S en Noruega.
Por otro lado Hyundai protagonizará la mayor llamada a revisión de la historia del coche eléctrico al tener que reemplazar 82.000 baterías de coches eléctricos ya vendidos en tres continentes, como ha reportado FCE.
