La Policía Nacional de diferentes ciudades de España estrenará un total de 22 motos eléctricas con la finalidad de la renovación del parque móvil. Se trata del modelo DSR, creada a manos del fabricante Zero Motorcycles.
Esta renovación de la flota de vehículos, dirigida para las Unidades de Prevención y Reacción (UPR), supone «resolver los graves problemas de seguridad energética, calentamiento global y contaminación del aire”. Las 22 unidades serán repartidas en diversas ciudades del territorio nacional: Madrid, Oviedo, Granada, Santiago de Compostela, Sevilla, Valencia, Zaragoza, Palma de Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria y Santa Cruz de Tenerife.
Las Zero DSR están alimentadas por un motor eléctrico que llega a desarrollar 69 caballos de potencia y un par máximo de 146 Nm, siendo capaces de lograr los 163 km/h de velocidad máxima y llegar de 0-100 km/h en 3,3 segundos.
Se alimentan de una batería de iones de litio con una capacidad bruta de 14,4 kW (12,6 kWh netos), de forma que su autonomía en ciudad alcanza los 262 kilómetros. En apenas 2,5 horas se completa una carga completa (Charge Tank opcional de 6 kW). Sin embargo, en una toma de corriente doméstica a 230 voltios el proceso se completa en 9,8 horas.
“Hay que destacar que la movilidad en la Policía Nacional es una herramienta fundamental ya que permite una rápida atención al ciudadano. Para procurar esta movilidad, era necesario el consumo de combustibles fósiles que provocaban la emisión de gases contaminantes, que se concentraban, sobre todo, en el ámbito de actuación de la Policía Nacional, es decir, en las grandes ciudades».
«Por este motivo, se tomó la decisión de adoptar medidas de cara a la protección ambiental, en consonancia con las políticas del Gobierno y de la Unión Europea, de cara a un desarrollo sostenible en conjunto con la Agenda 2030 promovida por la Unión Europea”, comentan desde el citado cuerpo.
Esta iniciativa se tomó durante el año 2020 en el marco de las distintas actuaciones que la Policía Nacional puso en marcha con el objetivo de modernizar su parque automovilístico con vehículos menos contaminantes. A ello se suman las 300 unidades del Peugeot 3008 híbrido enchufables repartidas a finales del año pasado.
Con la adquisición de estos modelos no sólo se pretende contribuir a la mejora de la calidad del aire, sino también servir de ejemplo para que los ciudadanos tomen conciencia sobre la importancia de una movilidad más sostenible.
El importe total de la adquisición, incluyendo las 22 motos y su correspondiente equipamiento y rotulación, asciende a 413.434,95 euros, lo que equivale a un coste de 18.795,23 euros por moto.
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