Hace unos días éramos testigos como Tesla confirmaba de forma oficial los planes de apertura de su red de Supercargadores a los coches eléctricos de otras marcas. Un momento de gran importante que permitirá salvo sorpresa, que a finales de año otros modelos puedan acceder a esta red. Pero en los últimos días coincidiendo con el inicio de las vacaciones se han dado situaciones de colapso en algunos Supercargadores. Algo que ha elevado las preocupaciones de los actuales propietarios que ven con temor como con la apertura, este problema pueda acentuarse.
Una de las fotos más llamativas ha tenido lugar en la localidad canadiense de Hope, Columbia Británica. Un nudo de conexión donde los clientes de Tesla pueden disfrutar de un total de 22 puntos de recarga. 10 puntos V2 de hasta 150 kW, y otras 12 tomas V3 de hasta 250 kW.
A pesar de esto, las largas colas han indignado a muchos clientes que estaban realizando su recorrido destino a su zona de vacaciones, o regresando de las mismas. Un desplazamiento que necesitaba una recarga y para lo que muchos clientes han tenido que esperar hasta dos horas y media hasta lograr un hueco libre. Y luego esperar el tiempo necesario para recuperar la carga suficiente.
La imagen se ha hecho viral con decenas de coches de Tesla esperando su turno para recargar. Algo que en caso de contar con una red abierta al resto de marcas sin duda habría empeorado la situación.
Anticiparse al problema
Suponemos que Tesla será consciente de estos problemas puntuales, y estará preparando una apertura con sentido que no colapse el sistema.
Por ejemplo, hacerlo en principio solo a los vehículos dotados de sistema de carga ultrarrápido. Al menos 100 kW o más, que permita mantener una mínima rotación que un modelo que cargue a 40 o 50 kW no podrá lograr.
También ampliando la red de carga en aquellas zonas susceptibles de sufrir más con la llegada de modelos de otras marcas. Principalmente en los lugares donde no haya alternativas de otras redes. Algo que supondrá realizar un esfuerzo económico extra para expandir más la red.
Y por último continuar mejorando las tasas y curvas de carga de sus vehículos, que permita sacar mayor partido a los puntos V3 que aumentarán este año su potencia hasta los 300 kW. Y es que una reducción en los tiempos de sólo 5 minutos por sesión y coche, puede hacer que una espera con cinco coches por delante que vayan a parar 30 minutos cada uno, nos ahorre una media hora de espera.
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