Bosch ha confirmado hace pocas horas importantes novedades para la próxima temporada dentro de su oferta de bicicletas eléctricas. Cambios que a primera vista no parecen muy radicales que afectarán a aspectos como el hardware de los motores y nuevas baterías, que quieren retornar a la marca alemana a la primera posición del sector.
Y es que hace un año uno de sus principales competidores, la japonesa Shimano, presentó un nuevo motor. El EP8. Un modelo que lograba exprimir al máximo las capacidades de sus 250W logrando un par motor de 85 Nm, lo que suponía igualar al motor Bosch Performance Line CX, pero con un cuerpo bastante más compacto y ligero.
Para contrarrestar la embestida de los nipones, Bosch ha presentado su visión de la bicicleta eléctrica del futuro en un evento previo al Eurobike donde muestra un nuevo sistema donde destacan aspectos como la posibilidad de personalización del conjunto, que además será inteligente y conectado gracias a una combinación de inteligencia artificial.
Nueva aplicación
La aplicación eBike Flow será la conexión central de la bicicleta con el sistema. Estará perfectamente conectada con todos los componentes de la bici en un conjunto que además podrá recibir actualizaciones inalámbricas que mejoren el conjunto y solucionen imprevistos. Esto significa que para los propietarios, su bicicleta podrá evoluciona constantemente después de la compra, y que además podrán añadir nuevas funciones que lance el fabricante una vez la bici ha salido de fábrica.
Otro aspecto que destaca Bosch es la personalización de nuestro producto a nuestras necesidades. El sistema inteligente eBike Flow permitirá entre otras cosas que el sistema pueda analizar nuestros datos y por ejemplo, ofrecernos rutas inteligentes para llegar a nuestro destino. También se adaptará a nuestro estilo de conducción, para recomendarnos las mejores rutas e nuestro día a día.
También ayudará a mejorar la seguridad, con elementos como el sistema que pide ayuda a los servicios de emergencia de forma automática en caso de accidente. Otro elemento clave de futuro será la interconexión de las bicis con otros vehículos y la infraestructura. Esto podrá aumentar la seguridad vial, especialmente en la ciudad. De este modo, las bicicletas podrían conectarse con los coches o camiones y avisar a los ciclistas con antelación de su presencia. Esto reduciría significativamente los peligros de los puntos ciegos para los ciclistas, por ejemplo, y evitaría muchos de los accidentes que se producen al girar.
Una tecnología que se sumará al conjunto de seguridad que hará más difícil el robo de las bicis con elementos como el bloqueo durante el estacionamiento, como el seguimiento por GPS.
La nueva batería Bosch PowerTube 750
Sin duda una de las grandes protagonistas de la presentación ha sido la nueva batería
PowerTube 750. Un modelo que ofrece la máxima autonomía de la actual gama de eléctricas de Bosch, que está diseñada pensada para los que necesiten recorrer grandes distancias.
Esta batería litio se integra en el cuadro de la bicicleta eléctrica y destaca por su peso de aprox. 4,2 kilogramos, que se caracteriza por una densidad energética especialmente alta. La PowerTube llega a una capacidad de 750 Ah, puede cargarse hasta el 50% con el 4A Charger en poco más de dos horas y completamente en unas seis.
Un nuevo modelo del que no indican la autonomía que proporcionará, algo que dependerá mucho de la propia bicicleta, pero que debería superar los 160 kilómetros en condiciones reales en un modelo de montaña, o ir más allá de los 200 km en una de carretera.
