El Salón del Automóvil de Múnich nos ha traído un aluvión de novedades, y una de las últimas es el espectacular prototipo Porsche Mission R. Una propuesta que combina tecnologías de vanguardia y materiales sostenibles, como elementos plásticos reforzados con fibras naturales, todo con la competición como único objetivo.
El Mission R es un modelo con un cuerpo de 4,33 metros de largo, lo que le coloca por tamaño en el segmento del Porsche Cayman, apenas 8 centímetros más largo. A pesar de esto, su carácter deportivo y no pensado para la carretera hace que su ancho se dispare hasta los 1,99 metros, lo que supone 19 centímetros más que el propio Cayman.
En materia de aerodinámica, el Mission R incorpora una evolución del Porsche Active Aerodynamics (PAA) con Drag Reduction System (DRS) en la sección frontal y en el alerón trasero. Su parte delantera presenta dos tomas de aire laterales con tres lamas cada una, mientras que detrás lleva un alerón regulable dividido en dos secciones.
Se trata de un concepto de competición 100% eléctrico que nos propone un diseño digno de un videojuego pero que mantiene bajo ese aspecto tan brutalizado las líneas características de los deportivos del fabricante de Stuttgart.
Dentro de su ultra bajo cuerpo esconde dos motores eléctricos de nuevo desarrollo que le ofrecen una potencia máxima de 800 kW (1.100 CV) en el modo clasificación, que le permiten pasar de 0 a 100 km/h en menos de 2,5 segundos, mientras que su velocidad máxima se sitúa por encima de 300 km/h. Según Porsche, además de rápido en recta, el Mission R es rápido en curva, logrando hacer los mismos tiempos por vuelta que el Porsche 911 GT3 Cup actual.
Gracias a la tecnología de 900 voltios y al sistema de carga Porsche Turbo Charging, este prototipo apenas se necesita una parada de 15 minutos durante la carrera para alimentar la batería desde el 5% hasta el 80%. gracias a un sistema de carga capaz de llegar a una potencia máxima de 340 kW. Algo que abre las puertas a recargas parciales durante las carreras como un elemento estratégico.
Un prototipo que apuesta por el cada vez más extendido principio de la sostenibilidad y la reducción de emisiones. Todo gracias a su sistema de propulsión libre de emisiones, y un cuerpo fabricado en gran parte de plástico reforzado con fibra natural (NFRP, por sus siglas en inglés), cuyo elemento básico es la fibra de lino. Este material ecológico también se utiliza en el labio del spoiler delantero, en el difusor y en los faldones laterales. El plástico reforzado está muy presente en el interior del Mission R, por ejemplo, en los paneles de las puertas, los asientos y la parte trasera.
Con un concept car, la pregunta siempre es qué quedará de él a largo plazo. Los anteriores conceptos de Porsche bajo el apelativo ‘Mission’, como Mission E y Mission E Cross Turismo, entraron en producción en una forma ligeramente modificada como Taycan y Taycan Cross Turismo respectivamente. Eso dice algo sobre la viabilidad de la Misión R que tal vez, y sólo tal vez…sea la semilla de un futuro superdeportivo.
Fuente | Porsche
