Thomas Schäfer, director ejecutivo de Skoda, ha revelado durante una reciente entrevista con un medio alemán que la firma checa ya no desarrollará nuevos híbridos enchufables, pasando a centrarse en los coches 100% eléctricos. La compañía a día de hoy cuenta con dos híbridos enchufables en su oferta, el Octavia iV y el Superb iV.
Al igual que ocurrió con el CITIGOe iV, el primer coche eléctrico de Skoda, el nuevo Enyaq iV está teniendo una gran acogida en el mercado europeo, pues ya acumula unos 70.000 pedidos, superando con creces las previsiones de los responsables de la marca. Además, hay que tener en cuenta que todavía falta por presentarse la variante Coupé, que supondrá entre un 20 y un 30% de las ventas del todocamino.
Skoda calcula que para 2030 los coches eléctricos se corresponderán con entre el 50 y el 70% de sus ventas totales (recordemos que la Unión Europea aspira a prohibir la comercialización de vehículos térmicos nuevos de cara al año 2035). Schäfer se muestra confiado e incluso afirma que, dada la evolución del mercado, sería posible incluso rebasar la tasa del 70% para finales de la década.
«A largo plazo, confiamos completamente en los automóviles eléctricos puros», ha señalado el ejecutivo, explicando que, tras los Octavia iV y Superb iV, Skoda no lanzará nuevos híbridos enchufables a pesar de que este tipo de vehículos tienen una gran importancia en el mercado de flotas. «No tiene sentido para nosotros. Nuestro futuro es el automóvil eléctrico puro».
Skoda lanzará tres coches eléctricos por debajo del Enyaq iV
Skoda confirmó recientemente que tras el Enyaq iV lanzará otros tres modelos eléctricos. Uno de ellos se encuadrará dentro de la gama «MEB Entry Family» del Grupo Volkswagen, por lo que competirá en el segmento B (utilitarios) y hará uso de la plataforma modular MEB Small, una variante abaratada y simplificada de la plataforma MEB ya vista en el Enyaq iV.
Para diferenciarse de sus hermanos de Volkswagen y CUPRA, el eléctrico de acceso de Skoda tendrá una filosofía propia, pues estará «orientado al espacio», lo que nos lleva a pensar que será un B-SUV. Al igual que el resto de integrantes de la «MEB Entry Family», tendrá un precio de partida de unos 20.000 euros antes de ayudas, por lo que será relativamente asequible.
La marca también se está planteando lanzar una suerte de equivalente eléctrico del Octavia durante la segunda mitad de la década. Aunque todavía no se tienen demasiados datos de este desarrollo, todo parece indicar que derivará bien del inminente Volkswagen ID.7, bien del futuro Volkswagen Trinity, las dos únicas berlinas eléctricas proyectadas por su matriz.
Fuente | Autogazette
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