MG, la histórica firma británica perteneciente al grupo chino SAIC, está logrando un interesante éxito en su regreso a los principales mercados mundiales. La compañía, que se ha convertido en la punta de lanza de su matriz a nivel internacional (Australia, Europa, India…), está cimentando su expansión gracias principalmente a la buena acogida de un modelo en concreto: el ZS EV.
Este SUV compacto es responsable de la exitosa reintroducción de MG en el viejo continente tras década y media de ausencia, plantando cara a las propuestas de otros fabricantes ya asentados gracias a su buena relación precio/producto, que le ha permitido atraer a un elevado número de compradores en los mercados del norte de Europa.
En el momento de su lanzamiento, el modelo anglo-chino equipaba un propulsor eléctrico de 143 CV (105 kW) y 353 Nm de par acoplado al eje delantero, el cual le permitía hacer hacer el 0 a 100 km/h en 8,2 segundos. Estos números son similares a los ofrecidos por rivales como el Nissan LEAF o el Volkswagen ID.3 Pure Performance.
Su pack de baterías de 44,5 kWh de capacidad con celdas de origen CATL y refrigeración líquida le proporcionaba por su parte un alcance máximo de 263 km bajo el ciclo de homologación europeo WLTP. En cuanto a la carga, el todocamino podía acceder a potencias máximas de algo más de 50 kW en corriente continua, recuperando alrededor del 80% de su alcance en unos 43 minutos.
El MG ZS EV quiere consolidar su dominio
Como puede verse, aunque las prestaciones del ZS EV son similares a las de sus rivales, su autonomía se queda algo descolgada frente a muchas propuestas de última hornada en los segmentos B (utilitarios) y C (compactos). Para mantener la competitividad de su principal embajador, MG lo ha sometido a un restyling que, además de incrementar su alcance, traerá consigo una estética renovada.
A partir de ahora, el ZS EV estará disponible con dos packs de baterías: uno de 50,3 kWh (Standard Range) asociado a un motor de 177 CV (130 kW) que le permitirá alcanzar los 320 km WLTP, y otro de 70 kWh (Long Range) ligado a un motor de 204 CV (150 kW) con el que llegará a los 440 km WLTP. Las prestaciones en ambos casos serán idénticas (0 a 100 km/h en 8,6 segundos, velocidad máxima de 175 km/h). Además, la marca inglesa también ha mejorado su sistema de carga, pues la variante Long Range contará de serie con un cargador trifásico de 11 kW (el Standard Range se quedará en 6,6 kW en monofásica). La versión más capaz llegará a un máximo de 90 kW en corriente continua.
Los grupos ópticos y los paragolpes son de nuevo diseño, mientras que la parrilla cegada da paso a un frontal de una pieza pintado en el mismo color que el resto de la carrocería, si bien cuenta con una serie de muescas en relieve para imitar el entramado de una rejilla tradicional. En el habitáculo son de nueva factura el cuadro digital, la pantalla táctil y el módulo de la climatización; además, se añade el sistema de conectividad MG iSMART. El renovado modelo llegará al mercado europeo en octubre, arrancando sus tarifas en 30.990 euros para el Standard Range y en 34.990 euros para el Long Range. Seguirá estando disponible con dos terminaciones: Comfort y Luxury.
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