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Este sistema solar, más batería más hidrógeno, quiere ser una herramienta para la independencia energética

En plena crisis energética, Europa busca desesperadamente alternativas que nos permitan reducir nuestra dependencia del petróleo y el gas. Entre estas están las energías renovables, que en las aplicaciones residenciales cuentan con alternativas como los sistemas solares, y aquellos que añaden una batería. Pero una empresa alemana está comercializando una solución que añade un sistema a hidrógeno que promete elevar la independencia al máximo nivel.

Y es que en en norte de España, y buena parte de Europa, cuando lleva el invierno las horas de sol caen drásticamente y los sistemas solares pierden producción. Algo que se puede compensar con una buena batería de respaldo. Pero la batería si no hay sol, no nos ayudará demasiado a no depender de la red. Algo que la compañía alemana HPS Home Power Solution quiere solucionar con su producto.

Para lograrlo, han diseñado el PICEA. Un sistema que permite combinar una instalación fotovoltaica, una batería, que se complementan con un electrolizador y una pila de combustible de hidrógeno. Esta permite complementar el almacenamiento y además ofrecer otros beneficios como trabajar también en la climatización con el calor residual.

Esta, tal y como explica la empresa, se logra mediante el aprovechamiento del calor que produce el equipo durante su operación. En vez de perderse, en este caso se saca partido de él para calentar el interior de la vivienda, además de para cubrir las necesidades de agua caliente sanitaria (ACS).

Según sus diseñadores, gracias a la elevada densidad energética lograda con el hidrógeno, logran ofrecer un sistema capaz de contar con cien veces más capacidad que una batería para el hogar media.

Básicamente la idea es aprovechar la producción de los meses de sol, o cuando haya excedentes de la instalación fotovoltaica, para guardar energía para usarla durante el invierno. Eso supone contar con un respaldo de unos 1.500 kWh en forma de hidrógeno, que se usarán cuando la instalación solar y la batería, un pack de 20 kWh, no puedan satisfacer las necesidades de la vivienda.

A estos se suman además otros 45 kWh de capacidad, en este caso del tanque térmico que puede combinarse con cualquier otro equipo de calefacción.

La instalación se divide entre los paneles que irán colocados en el techo de la vivienda, o donde el cliente prefiera, una batería que también puede ser colocada en el interior de la casa o en un habitáculo diseñado para ella, mientras que los depósitos de hidrógeno irán fuera de la vivienda, y que podrá constar de entre 1 y 5 depósitos según la configuración.

El precio de la independencia energética con hidrógeno

Para aquellos que se habían echo ilusión por contar por fin con una solución efectiva para por fin poder reducir al mínimo su dependencia de la red eléctrica, y no sufrir con las noticas sobre el coste del MWh, la mala noticia es que hablamos de un sistema caro. Muy caro.

Según la página web del fabricante, que ya acepta pedidos, el precio de una instalación oscila entre los 70.000 y los 100.000 euros (según configuración). Un precio que no incluye los paneles solares, y que cuenta con una garantía de 10 años. Un coste al que en lugares como Alemania, se pueden restar ayudas de hasta 15.000 euros.

Pero podemos pensar que el esfuerzo puede merecer la pena por lograr la independencia energética. Pero el sistema de hidrógeno necesita una supervisión y mantenimiento que la empresa cobrará con una tarifa anual obligatoria que asciende a 499.8 euros.

Una idea que suena muy bien, pero que se pierde entre pérdidas energética y costes astronómicos que tendrán que bajar mucho para que pueda ser una alternativa más popular.

Podéis ver la ficha técnica, en alemán, en la web del fabricante (Ver página)

Fuente | Homepowersolutions

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