Manel Romero, un ingeniero industrial catalán, lleva tres años desenganchado de la gasolina. Sustituyó su coche por un Nissan LEAF y ha aprovechado el aniversario para hacer un sumario de todos los ahorros que ha conseguido.
En primer lugar, dice haber ahorrado 6.799 euros en gasolina, es decir, 5.230 litros a un precio medio de 1,3 euros. Su Nissan LEAF ha recorrido 87.183 kilómetros, para lo cual ha necesitado 13.949 kWh de electricidad y 1.176 euros de factura. En otras palabras, 1,35 euros cada 100 kilómetros y un consumo medio de 16 kWh/100 km.
La recarga la efectúa siempre en casa, aprovechando la tarifa nocturna o los fines de semana. Tiene contratada la electricidad con un proveedor que le garantiza el origen renovable, y además de eso unas placas solares le aportan el 40% de su consumo doméstico. Ha abandonado el suministro de gas natural también, todo lo tiene eléctrico y con aerotermia.
Solo en combustible ha ahorrado 5.622 euros, es decir, una media de 1.874 euros cada año. Como efecto colateral, son 13,2 toneladas de CO2 que se han dejado de emitir a la atmósfera. Otro capítulo de importante ahorro es el mantenimiento, se ha dejado de gastar 693 euros y mantiene los neumáticos de serie.
También dice haberse ahorrado 885 euros en estacionamiento regulado al tener su coche una tarifa de 0 euros. Dado que es residente en Cataluña, también se ha ahorrado 974 euros en peajes por la bonificación de coche eléctrico, así como 402 euros en el impuesto municipal de tracción mecánica (IVTM). Asimismo, la tasa autonómica del CO2 también se la ahorra, aunque no la ha contabilizado.
Considerando todas las cifras anteriores, el ahorro alcanza los 8.578 euros, es decir, el sobrecoste completo del Nissan LEAF respecto a un equivalente de combustión interna. Cada año, la media de ahorro sale a 2.860 euros.
En cuanto al tema candente cuando hablamos de un Nissan LEAF, la degradación de la batería, en este caso parece que después de casi 90.000 km esta unidad mantiene con buena nota la capacidad original logrando una autonomía real de entre 220 y 230 km con cada carga. Algo que sin duda es una buena noticia después de la nefasta experiencia de muchos usuarios de la primera generación.
La conclusión que podemos obtener del hilo de Twitter en el que ha reflejado todos estos datos es que es posible descarbonizarse uno mismo, al menos en gran medida, pero que esto no basta, también hay que reflexionar sobre todas aquellas actividades que son emisoras de gases que acaban contribuyendo al cambio climático.
Gracias Joan por el aviso
