La guerra por las cifras muchas veces trae sorpresas. Es lo que le ha pasado a Volkswagen, que ha mostrado a sus inversores un gráfico donde coloca a sus modelos eléctricos en lo más alto de las ventas en Europa. Unas cifras que con las recientes entregas de Tesla, han quedado en evidencia.
Según estos datos, Volkswagen habría producido en Europa en 2019 un total de 120.086 unidades de sus modelos eléctricos, lo que le permite superar a Tesla, con 114.114 unidades, y a Renault, con 61.054 unidades. Sin duda unas cifras muy a tener en cuenta.
El problema es que mientras que los modelos ID solo se han entregado hasta hace pocas semanas en Europa, Tesla ha entregado en todo el mundo.
Ahí está la polémica, ya que según Volkswagen, su familia ID ha logrado matricular entre 2019 y 2020 un total de 246.640 unidades. Un número muy por debajo de las expectativas que indicaban que en 2021 superarían las 330.000 unidades, que se sumarían a las unidades entregadas en 2020 y que claramente se han quedado por debajo de las expectativas.
Frente a esto, Tesla ha logrado cerrar el último trimestre de 2021 con unas entregas de 308.000 unidades en todos sus mercados. Algo que nos indica que en solo tres meses (septiembre, octubre y noviembre) los americanos han entregado más coches eléctricos que la familia ID de Volkswagen desde el inicio de su producción a finales de 2019.
Por supuesto, ahora Volkswagen también puede añadir las entregas de sus modelos en China, donde están teniendo una acogida inicial bastante buena. Por ejemplo, en el último trimestre de 2021 han logrado superar a marcas locales como NIO o Xpeng, colocando 41.690 unidades.
Queda ahora ver si los alemanes logran mantener su buena marcha en el gigante asiático y de esa forma pueden hacer de verdad competencia a Tesla.
Pero puede que la velocidad lograda por los americanos sea ya insalvable, ya que están creciendo por encima del 80% anual, y todavía con dos nuevas plantas pendientes de comenzar sus operaciones, Texas y Berlín, y un Model Y todavía comenzado su andadura comercial en Europa a la espera de que la fábrica de Alemania reciba luz verde para comenzar a sacar adelante unidades que engorden las cifras de los norteamericanos.
