Pedro Sánchez ha anunciado que, como parte del plan anticrisis que el Gobierno aprobará este sábado, se bajará el IVA de la luz del 10 al 5%. Esta medida no fue incluida en el anterior decreto anticrisis, pues la Comisión Europea envió una carta a los estados miembros avisando de que descartaran este tipo de bajadas por su reducida efectividad a la hora de trasladarse al consumidor final.
Este giro supondrá reducir el IVA de la luz al mínimo permitido por la normativa comunitaria; por lo tanto, España se convertirá junto con Malta en el país de la Unión Europea con el IVA más bajo a la electricidad. Sin ir más lejos, en Alemania este impuesto todavía se mantiene al 19%; es decir, el mismo porcentaje que se paga a la hora de comprar un automóvil, por ejemplo.
En paralelo, la ministra de Economía, Nadia Calviño, ha confirmado que todavía se está estudiando la fórmula para gravar los beneficios extraordinarios de las compañías eléctricas. El objetivo final es lograr un reparto más justo del impacto de la guerra entre Rusia y Ucrania, cuyos efectos en la economía europea cada día se hacen más patentes.
«La visión del gobierno es única y está clara, trabajamos a nivel técnico para articular todas las medidas lo mejor posible. Las noticias de esta semana no son positivas porque los futuros sobre el gas han subido un 40% en la ultima semana y eso nos lleva a trabajar en un escenario de inflación más alta durante más tiempo. Este es el contexto en el que estamos trabajando con una aproximación progresista. Eso implica gravar los beneficios extraordinarios de las eléctricas, pero tenemos que encontrar el instrumento para hacerlo».
El Gobierno ya bajó los impuestos a la luz en 2021
Es interesante recordar que, además de bajar el IVA del 21 al 10%, el año pasado también se redujo el impuesto especial sobre la electricidad, que pasó del 5,113 al 0,5%. Por otro lado, recientemente entró en vigor la llamada «excepción ibérica», que permitirá a España y Portugal poner topes al precio del gas de forma temporal para reducir la factura de los consumidores.
La península ibérica tiene un alto porcentaje de renovables y pocas interconexiones, y dado que el precio del gas empleado para generar electricidad condiciona todo el mercado eléctrico (la energía de origen nuclear o renovable ahora mismo es más barata), en Europa se decidió reconocer el estatus especial de nuestra región al aprobar esta medida. No en vano, el gas apenas supone el 15% del mercado eléctrico español.
