BMW ha detectado un potencial riesgo de incendio en un número relativamente pequeño de BMW iX e i4, sus estandartes de la gama eléctrica, por módulos de batería que no cumplían las especificaciones del fabricante. Nos hemos enterado que en Estados Unidos hay 83 unidades que necesitan pasar por el servicio oficial. Han pedido a sus dueños que no los utilicen: ni conducir ni recargar.
Dado que la producción de los BMW iX e i4 se ha hecho en Europa, también habrá unidades afectadas en el Viejo Continente, así como en otros mercados de exportación. El problema está con unidades fabricadas entre el 22 de noviembre de 2021 y el 30 de julio de 2022, que pueden sufrir un cortocircuito que acabe en incendio por defecto en la placa del cátodo. Al parecer, BMW se ha dado cuenta del problema antes de que se hayan producido incendios o daños a terceros.
Si hay algún afectado en España, recibirá un aviso a través de la DGT sobre los detalles de la campaña de revisión. Como suele ocurrir en estos casos, cualquier cambio que necesiten las baterías no tendrá coste alguno para el cliente, solo está la molestia de no poder usar el coche hasta que pueda ser recepcionado en un servicio oficial.
BMW empezó a empaquetar módulos de batería en Leipzig cuando comenzó la producción del BMW iX, y recientemente ha añadido capacidad para empaquetar los del BMW i4, cuando antes necesitaba un proveedor. BMW Group de momento no produce sus propias celdas, tira de unos proveedores y estos deben cumplir las especificaciones impuestas por el fabricante. En este caso, se trata de Samsung SDI.
La llamada a revisión es voluntaria, no ha tenido que forzarla ningún regulador, ni viene condicionada porque ya haya pasado algo. En el mundo de las llamadas a revisión, este es el escenario más deseable (el siguiente a que no se detecten problemas de calidad). Afortunadamente para BMW -y su proveedor-, el número de unidades potencialmente afectadas es reducido, no como le pasó a General Motors y LG con decenas de miles de Chevolet Bolt; los llamaron a revisión a todos.
En las baterías con química NMC (níquel, manganeso y cobalto) hay cierto riesgo de incendio cuando hay defectos de fabricación o el sistema de control de las baterías no es capaz de detectar una situación anómala a tiempo. Pese a lo que pueda parecer, los coches eléctricos (tengan las baterías que tengan) no son más propensos a incendiarse que cualquier otro, ni en términos absolutos ni relativos. Es más, BMW ya ha tenido que hacer llamadas a revisión por riesgo de incendio en modelos térmicos e híbridos enchufables. Lo que sí es cierto es que, si se incendian, la extinción es muy complicada, lleva tiempo y precisa de medios especiales.
